El brutal y sangriento golpe de Estado de Pinochet contra el presidente social- demócrata Salvador Allende cumple cuatro décadas. Los chilenos conmemoraron la fecha y recordaron a los más de 1.200 desaparecidos durante la dictadura, con diferentes manifestaciones públicas.
Cerca de mil personas convocadas a través de redes sociales, se acostaron boca arriba por 11 minutos en las orillas del palacio de La Moneda y la avenida Alameda de Santiago para conmemorar el 11 de septiembre de 1973, día en que murió Allende defendiendo las instituciones democráticas y se instauró la dictadura de Pinochet.
El icónico episodio llamado “Querer no ver”, invitó a los chilenos a protestar por las sistemáticas violaciones a los derechos humanos registradas en la dictadura que dejó 3.200 víctimas y 1.210 desaparecidos.
El presidente de Chile Sebastián Piñera, reiteró durante una misa en conmemoración del evento que “lo que ocurrió después, y particularmente las graves, reiteradas e inaceptables violaciones a los derechos humanos, son responsabilidad de quienes las cometieron y de quienes los ordenaron a atropellar los derechos humanos, pero también de los que pudiendo haber hecho más, que tenían cargos de responsabilidad, influencia o investidura, simplemente no lo hicieron”.
La denuncia la lanzó el mandatario luego de que en los últimos días el principal gremio de jueces del país, pidiera disculpas por la falta de compromiso por parte del organismo con los ciudadanos que denunciaron la violación de sus derechos durante el régimen de Pinochet. Vea aquí la disculpa oficial de los jueces.
De igual manera Piñera invitó “a reflexionar respecto de lo que debe significar esta conmemoración de lo que ocurrió hace 40 años atrás”.
Por otro lado, durante el aniversario se registraron jornadas de manifestaciones que terminaron con la incineración de dos buses en la ciudad de San Bernardo, a 20 kilometros de Santiago de Chile. Según medios locales los manifestantes levantaron barricadas en las calles y atacaron a vehículos particulares que transitaban por la zona.
Las autoridades iniciaron el despliegue de 8.000 policías para despejar los bloqueos y asegurar que el aniversario se desarrolle sin más contratiempos.
