El ídolo del Baloncesto Kobe Bryant, estuvo a la altura de su clamorosa despedida del deporte profesional, como si estuviera en el mejor momento de su carrera y no en su último partido, a sus 37 años, tras 20 años de debutar.
Kobe Bryant tuvo una actuación descomunal en su despedida, anotando 60 puntos decisivos ante Utah, en la remontada de los Lakers 101-96. El equipo jugó para él y Kobe respondió, tras anotar 22 canastas en sus 50 tiros de campo, incluido un 6 de 21 triples, además de 10 de 12 en tiros libres, 4 rebotes y 4 asistencias.
Como en sus mejores tiempos, en un Staples Center desbordado por la emoción y la admiración. Fue la sexta vez en su carrera que alcanzó los 60 puntos, que además, supone el mejor registro en la NBA esta temporada.
Llegó con Michael Jordan y se va, veinte años después, dejando que Stephen Curry y LeBron James prosigan la estirpe de los legendarios de la NBA. En todo ese tiempo fue el alma de los Lakers, ganó cinco anillos, tres en su primera etapa junto a Shaquille O’Neal y dos ya en su etapa de madurez.
Desde que en noviembre, tras varias lesiones lesiones importantes en el tendón de Aquiles, la rodilla y el hombro, anunció que lo dejaba, los desplazamientos de los Lakers fueron una gira más propia de una estrella del rock mundial. En cada una de las canchas en las que tanto se le odió y se le abucheó durante tantos años. Al final, afloró un sentimiento de gratitud y admiración hacia un jugador único, de una competitividad extrema.
Magic Johnson, su predecesor en los Lakers, hizo de introductor del acontecimiento en el repleto Staples Center de Los Ángeles. Shaquille, Fisher, Popovich, Nowitzki, Garnett, Iverson, Curry, Durant, LeBron, Pau Gasol, Odom, Phil Jackson, Wade, sus compañeros de equipo actuales y también uno de sus más ilustres seguidores, Jack Nicholson –“creo que debería retirarme contigo”, dijo el actor-, fueron algunos de los que le dedicaron mensajes de despedida a Kobe y que fueron emitidos a través del vídeo marcador del Staples.
“Me di cuenta de que había logrado todo aquello que había soñado. No era tan importante ser el mejor de la historia sino hacia donde iba mi carrera y la influencia sobre la siguiente generación …No se podía escribir mejor guion que este”, dijo Kobe Bryant en su alocución ante el público una vez finalizado el partido.
