La cifra de palestinos muertos en Gaza desde que comenzó la operación israelí “Pilar Defensivo” contra los grupos islamistas de la franja se elevó hoy a trece, siete de ellos civiles, y la de heridos a 140, informaron fuentes médicas en Gaza capital.
De los trece fallecidos, siete son civiles y los otros seis son milicianos de Hamás, señaló Ashraf al Qedra, portavoz del Ministerio de Sanidad del gobierno del movimiento islamista Hamás.
Las últimas víctimas son dos civiles que perecieron esta mañana en un bombardeo israelí en la localidad de Yabalia, en el norte del enclave palestino, aseguró Al Qedra.
Otros tres palestinos murieron hoy, todos ellos milicianos, en un ataque israelí contra la ciudad de Jan Yunis, en el sur de la franja, informó la agencia de noticias palestina Maan.
Se trata de Habes Masmah, de 30 años y comandante de seguridad de las Brigadas de Ezedín Al Kasam, brazo armado de Hamás, que pereció cuando fue impactado por un proyectil israelí cuando se trasladaba en una motocicleta.
Otros dos miembros de la milicia, identificados por Maan como Wael Haidar al Ghalban e Hisham Muhamad al Ghalban, también perecieron en el ataque.
Entre los trece fallecidos desde ayer se encuentran dos niños (de siete años y once meses) y una mujer embarazada.
En Israel, dos mujeres y un varón perecieron esta mañana por el impacto de un cohete palestino contra su vivienda en la ciudad de Kiryat Malaji, desde cuyas ventanas observaban los ataques de ambas partes.
Además, alrededor de una decena de personas han resultado heridas en las poblaciones israelíes cercanas a Gaza, informó a Efe la Estrella de David Roja (equivalente en Israel a la Cruz Roja).
Las milicias palestinas han lanzado más de 200 cohetes en la nueva oleada de violencia que vive la zona, que se renovó ayer con el asesinato israelí del líder del brazo armado de Hamás Ahmada Yabari, confirmó a Efe una portavoz del Ejército israelí.
La Fuerza Aérea de Israel, por su parte, ha atacado alrededor de 150 blancos en Gaza desde que empezó la operación, indicó la portavoz militar.
La Policía israelí ha aumentado el nivel de alerta al segundo más alto en todo el país para evitar posibles ataques en el interior.