Los comerciantes bogotanos le dieron buen recibo a la baja en los tipos de interés por parte del Banco del República y precisaron que pasar del cinco por ciento al 4,75 por ciento animará a los colombianos a demandar más bienes y servicios.
El presidente de la Federación Nacional de Comerciantes, Fenalco Bogotá, Juan Esteban Orrego aseguró en Confidencial Colombia que dadas las condiciones se vislumbra una mejor perspectiva para el remate de año. El empresario habló sobre diversos tópicos económicos y políticos.
Según el dirigente gremial, la contracción en la demanda del segundo trimestre tuvo como origen el encarecimiento del crédito, pero de manera paralela una reducción considerable en la construcción que afecta la economía por menor demanda.
Orrego precisó que la noticia de la caída en tasas es muy propicio por cuanto el comercio desde ya se prepara para las ventas de final de año en las cuales recae la esperanza de un mejor crecimiento en lo sectorial y en lo que tiene que ver con el aporte al PIB.
Para este administrador de empresas, de reconocida trayectoria en el sector textil, el momento es más que oportuno para comprar ropa, calzado y bienes porque los almacenes, los centros comerciales y las tiendas tienen promociones muy favorables para la familia colombiana. Explicó que muchos comerciantes de fuera de Bogotá empiezan a surtir sus vitrinas desde septiembre y octubre.
“Con los cambios de colección hay ofertas muy sugestivas, pero de igual manera los nuevos jugadores del comercio arrancan con precios bajos para cautivar a los nuevos clientes, la idea es que la gente salga y le saque el máximo de provecho a las promociones o a la apertura de nuevos centros de comercio”, declaró Orrego.
Invitó a los capitalinos y a los colombianos que se surten en la capital a realizare sus compras con tiempo para evitar las congestiones típicas de fin de año. Aseguró que con ello se gana en actividad comercial, en movilidad y en seguridad.
Sobre la coyuntura económica y la situación internacional de los mercados por la Eurozona y el mismo Estados, conceptuó que la realidad de Colombia viene siendo favorable desde hace algunos años por cuanto el país ha mostrado crecimiento económico, mayor empleo y una considerable inversión extranjera. Anotó que la calidad de vida ha mejorado por las bondades del comercio internacional y ello se explica en que la gente tiene más acceso a diferentes productos que costaban más en el medio local.
Sobre la movilidad aclaró que esta se complicó no por las deficiencias del pico y placa sino por la facilidad que hay actualmente para adquirir vehículos. Anotó que importar un coche se hace a menor precio por aristas como revaluación, desgravación arancelaria o acuerdos como el G-2 con México.
“Hay ofertas muy llamativas y unos sistemas flexibles de financiación que permiten adquirir carros, motos o cualquier otro medio de transporte. La situación es igual para enseres y electrodomésticos que facilitan la vida”, dijo el señor Orrego.
Aclaró que si bien la favorabilidad del comercio en lo corrido del año se ha desacelerado un poco, esto no quiere decir que el país esté tocando niveles negativos. Anotó que los registros son temporales y confió en un mejor comportamiento de la economía colombiana que se convirtió en un destino muy apetecido para la inversión.
“Así la economía mundial se esté yendo a pique, Colombia es un país pujante que se consolidó como un paraíso para inversionistas en donde hay crecimiento, renta y otras bendiciones. Ante la situación de zozobra, es muy grato para los inversionistas encontrar islas con situaciones diferentes a la tendencia mundial”, consideró el empresario.
Otra ventaja, dijo, es la posición geográfica del país y las condiciones democráticas y de reglas de juego que tanta tranquilidad inyectan.
Hay que rodear las tropas
En opinión del presidente de Fenalco Bogotá, Juan Esteban Orrego, hay circunstancias que deprimen y generan malestar, pero consideró determinante reactivar a la fuerza pública para evitar que los grupos armados al margen de la ley retomen espacios que se habían ganado.
Aclaró que el gobierno debe luchar hasta sus últimas consecuencias por mantener la sensación de institucionalidad y seguridad macro. Expresó que ahora más que nunca y pese a las precarias noticias, hay que mantener en alto la moral de la tropa sobre la base que el error de uno, no puede generalizarse para el total de las fuerzas armadas y de Policía.
“Necesitamos seguridad y tranquilidad para la gente y los connacionales, pero también para los inversionistas que podrían ver en riesgo su estancia en Colombia”, apuntó.
Sostuvo que la defensa y la protección de los colombianos debe hacerse sobre pilares de probidad y trabajando como se debe hacer, es decir con un ejercicio bien hecho. “Desde aquí hacemos votos para que todo le salga a las mil maravillas al gobierno de tal manera que no vallamos a retroceder”.
A denunciar se dijo
Para el presidente de Fenalco Bogotá, es urgente que la comunidad denuncie los casos de atraco, robo o cualquier modalidad de delincuencia común y organizada.
Anotó que este es un tema básico porque los registros no muestran el total de delitos o ilícitos en contra de la ciudadanía. “En Bogotá son realmente muy bajas las estadísticas de denuncia y esa situación es complicada porque ello hace que inclusive las bandas delincuenciales reincidan en los mimos lugares en donde cometen sus fechorías”, concluyó Orrego.
Infraestructura con capital privado
Si bien el gran dolor de cabeza de Colombia de cara a los retos comerciales es la infraestructura, Fenalco Bogotá considera que al país y a Bogotá en particular le llegó la hora de pensar y hacer uso de las concesiones de largo plazo. Su Presidente, Juan Esteban Orrego afirmó que la infraestructura para el TLC se puede apalancar con fondos de pensiones, mercado de capitales y una sinergia que consolide alianzas público-privadas.
Sobre el metro y el sistema integrado para la ciudad anotó que es urgente trabajar a toda máquina y a todo vapor para entregarle a Bogotá una obra que requiere desde hace ya muchos años y que no se ha concretado por la falta de voluntad política. “Esperamos que se tomen medidas acertadas en ese sentido para darle a Bogotá parte de la solución que requiere con el metro, pero aquí vamos a terminar con autopistas de dos pisos así suene lunático pues con buenos proyectos todo es viable”.
En infraestructura hay que hacer un trabajo juicioso y permanente en donde las grandes firmas de infraestructura se conviertan en la gran solución, inclusive para el metro. “Necesitamos proyectos bien trazados que permitan una veeduría seria y que arroje los mejores resultados”.