Bogotá a través de sus fachadas

Una “boleróloga” bogotana, periodista, filósofa e historiadora del arte se dedicó a rescatar y descubrir a Bogotá a través de sus fachadas. Una tarea que se materializa en un libro que honra la memoria de la calle bogotana.

Durante cuatro meses, Lizeth León mejor conocida como Cucharita de Palo en Twitter, recorrió las 20 localidades bogotanas ilustrando las fachadas de sus casas. Fue un dibujo diario durante ese periodo de tiempo.

Armada con una cámara fotográfica de bolsillo o con su teléfono celular, Lizeth, fotografió las que le parecieron las fachadas más interesantes estética y urbanísticamente. Luego, las dibujaba basada en la fotografía que había tomado.

Esta joven bogotana que nunca se ha mudado de La Candelaria como fuera para irse por un tiempo a Europa y estudiar historia del arte en Roma, es una convencida de que la memoria de la ciudad es una memoria activa. Además, sostiene que las narraciones de Bogotá deben trascender la nostalgia chapineruna que ha calado como discurso y que ha generado todo un lenguaje y una apropiación de la Bogotá cachaca de los 30.

Para Lizeth el ejercicio de pintar sus “Fachadas Bogotanas” fue un ejercicio de ampliar las fronteras de lo que ha sido Bogotá para ella. A través de esa labor ha podido comprender dinámicas propias de cada localidad y de cada barrio que de otra manera serían muy difíciles de asimilar.

Sus dibujos llenos de color trascendieron el ejercicio privado y a través de un proyecto editorial naciente y de una campaña de Crowdfounding se conviertieron en un libro que se está prevendiendo en la plataforma Indiegogo.

Lo que comenzó como un proyecto de búsqueda de respuestas sobre Bogotá y sus imaginarios se terminó convirtiendo en un impreso que ha ido llegando a cada vez más gente, consiguiendo más de 3. 300 dólares en 13 días. La apuesta de Lizeth es la apuesta de una bogotana enamorada de su ciudad y que busca que la memoria de esos barrios que empiezan a desaparecer para abrirle campo a los conjuntos cerrados y grandes edificios no se quede en los relatos de esquina.