Decenas de manifestantes entre los que se encuentran estudiantes de la Universidad Pedagógica y Tecnológica (UPTC), atacaron con piedras y palos los locales comerciales y la Alcaldía de Duitama. Por el crítico escenario del municipio que amaneció con toque de queda, los ciudadanos decidieron cesar toda actividad rutinaria y cerraron las puertas de sus negocios, cancelaron las jornadas laborales y congelaron el servicio de transporte público hasta que se normalice la situación.
En el municipio de Boyacá, los habitantes no abrieron sus negocios, fue suspendido el servicio de transporte público, se cancelaron las clases en los colegios y se registran 12 puntos viales bloqueados por las manifestaciones. Al paro se unirán este sábado los caficultores del Huila, que se tomarán las carreteras para expresar su inconfrmismo.
Al mismo tiempo, en Ventaquemada Boyacá, el municipio fue militarizado para evitar contratiempos de mayor envergadura, como los que se registraron en la región de Alto El Moral donde un motociclista murió al toparse con un alambre que los manifestantes habían templado en una de las vías del sector. Los habitantes de Ventaquemada afirman abusos por parte de los militares.
La tensión es tal que en Sotaquirá escasea la gasolina, los alimentos y se regaron 6mil litros de leche en la vía principal a causa del paro.
Las protestas han hecho eco y ahora, en el departamento de Huila, donde los primeros días del paro lo campesinos protestaron sin vías de hecho, ya se registraron los primeros encuentros entre los manifestantes y la policía. En el corregimiento de Castilla, alrededor de dos mil personas se enfrentaron con los uniformados y un camión fue incinerado. Asimismo tres mil lecheros y ganaderos de El Pato, Guayabal y Balsillas en Caquetá, obstaculizaron la vía que comunica a Neiva con el sur del país.
Paralelamente, unos 73mil caficultores del Huila anunciaron que se unirán este sábado al paro nacional. En un comienzo el gremio cafetero se había mantenido al margen de las movilizaciones, sin embargo decidieron salir a protestar en las carreteras a partir de este fin de semana.
Tras una reunión de la comisión del Gobierno encargada al ministro de Interior, Fernando Carrillo, con los campesinos de la manifestaciónen Tunja, se condicionó un eventual dialogo entre las dos partes para levantar los bloqueos en las vías del departamento y colaborar con la normalización del paro. De igual manera el ministro de Agricultura Francisco Estupiñan, se comprometió a enviar negociadores a la mesa de diálogos que no se retirarán hasta que se logre un acuerdo.