El cardenal de Los Ángeles, Roger Mahoney, respondió hoy durante más de 3 horas ante varios abogados sobre su presunta vinculación en un escándalo de abusos sexuales a menores dentro del seno de la Iglesia.
“Relativamente imperturbable”, Mahony respondió al interrogatorio bajo juramento tras las acusaciones vertidas contra él que lo acusan de haber ocultado dichos abusos por parte de otros clérigos.
“Se mantuvo en calma y aparentemente sereno en todo momento”, dijo el abogado Anthony De Marco, que representa a un hombre que demandó a la Archidiócesis de Los Ángeles por el abuso que dice haber sufrido a manos de un sacerdote en 1987.
Mahony ha testificado en varias ocasiones en el pasado, pero la sesión de hoy fue la primera en la que se ha tratado la reciente publicación de los registros internos de la Iglesia que muestran los nombres de los presuntos abusadores.
De Marco se negó a detallar tanto las preguntas a las que fue sometido Mahony como las respuestas que dio el cardenal, citando una orden de protección judicial.
El pasado 31 de enero, el arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, destituyó de todos sus cargos a Mahony, prelado jubilado de esa archidiócesis, por no haber denunciado algunos de los centenares de casos de abusos sexuales de menores cometidos por sacerdotes y por la mala gestión de los mismos.
En particular, Mahony está relacionado con el caso del cura mexicano Nicolás Aguilar Rivera, de la archidiócesis de Los Ángeles, que tras las denuncias de algunas de las víctimas huyó a México.
Según las acusaciones, tras las denuncias de las familias de las víctimas, la Iglesia hizo de todo para retrasar el arresto y así se permitió escapar a México a Aguilar Rivera, quien sólo después fue suspendido.
En los informes confidenciales publicados por la Archidiócesis aparecen los nombres de 120 sacerdotes relacionados con casos de pederastia.
En esos informes se decía que la actuación de Mahony estuvo marcada por la protección de los curas acusados y por su intención de evitar que los casos salieran a la luz.
En 2007 la Iglesia católica estadounidense indemnizó a más de 500 víctimas con 660 millones de dólares, tras alcanzar un acuerdo extrajudicial.
La declaración se produjo justo antes de que Mahony viajara a Italia para votar en el cónclave que elegirá al próximo Papa.
En una publicación en su cuenta de Twitter el pasado viernes, Mahony escribió que su testificación tendría lugar “tan sólo unas pocas horas antes” de su partida hacia Roma.
Con EFE