Los embajadores de Colombia y Perú, celebraron este viernes una reunión para agradecer a España su intervención en la firma del acuerdo para la exoneración de visados de corta estancia, que se llevó a cabo este miércoles en Bruselas.
“Queremos mostrar públicamente nuestra gratitud a España por el papel fundamental que ha jugado en este proceso”, declaró Fernando Carrillo.
Según el embajador colombiano, es “la lógica” lo que ha llevado a Perú y Colombia a ser los países pioneros en la exención del visado ‘Schengen’. “No tenía sentido echar abajo las barreras comerciales para los bienes, las mercancías y los servicios y dejar de lado a las personas, precisamente sometidas a esa ‘antipática’ barrera”, manifestó el diplomático.
“Este paso no supone únicamente el reconocimiento de la dignidad de nuestros ciudadanos, sino que además es un éxito de la política exterior española”, puntualizó también Carrillo Flórez.
A su vez, el embajador recordó el inicio de este acuerdo, que es ya una realidad. Esto tuvo lugar a principios del mes de agosto de 2013, cuando el ahora embajador de Colombia en España ocupaba el puesto de ministro de interior. “Las primeras reacciones, tanto en Colombia como en España”, fueron de sorpresa. “¿Quién tuvo ese despropósito de idea?”, formuló Carrillo, reproduciendo las impresiones de ambos países, que veían el proyecto como “un fracaso diplomático”.
“La propuesta llegó en el momento en que Europa estaba levantando las fronteras frente a la inmigración, nadie pensó que eso fuera a tener éxito”, confesó el diplomático. De hecho, en la primera reunión de la Unión Europea en la que trataron la posible exención del visado ‘Schengen’, en Septiembre del 2013, España y Portugal fueron los únicos países que votaron a favor de esta medida.
Sin embargo, este sería sólo el punto de partida de un largo camino que, tanto Colombia como Perú, recorrerían para lograr que los ciudadanos de ambas naciones puedan viajar a Europa sin visa, para periodos de corta estancia. Así “lo que era un fracaso se convirtió en todo un éxito diplomático”.
El acuerdo fue firmado este miércoles en el marco de la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) junto a la Unión Europea (UE), que tiene lugar en Bruselas. Allí, las ministras de relaciones exteriores de Perú y Colombia, Ana María Sánchez y María Ángela Holguín Cuellar, rudicaron el texto final del Acuerdo de Exención del Visado de Schengen.
Las consecuencias del acuerdo
A pesar de que la ceremonia del miércoles es el acto de iniciación, es decir, de colocación de las iniciales de los firmantes en las hojas del acuerdo, tiene una importancia clave. Con este evento, se deja en firme el contenido del documento, que será oficializado una vez se traduzca a cada uno de los idiomas de los países miembros de la Unión Europea y se realice la ceremonia de firma definitiva.
Cuando esto ocurra, los ciudadanos de ambos países podrán ingresar hasta por 90 días, sin necesidad de visa, a 26 de los 28 Estados miembros de la Unión Europea, entre los que no se encuentran Reino Unido e Irlanda.
Se prevé que, gracias a dicho acuerdo, aumente el flujo turístico, se faciliten los contactos entre actores económicos y se incremente el número de oportunidades para intercambios estudiantiles.
España será uno de los países más beneficiarios de la supresión de los visados de corta duración. En el caso de Colombia, son más de 600.000 colombianos residentes en dicho Estado los que se podrán beneficiar de este acuerdo que, según ambos diplomáticos, tendrá una repercusión especial en los familiares de este colectivo, ya que “podrán venir más a menudo a visitarles”.
Según datos del Gobierno de Colombia, más de la mitad de los inmigrantes colombianos que se encuentran en España (380.000) disponen de la doble nacionalidad. Una cifra muy significativa, puesto que se trataría del país de América Latina con más integrantes con doble nacionalidad, junto con Perú.
Por su parte, Perú cuenta con 150.000 ciudadanos residiendo en España, aunque este colectivo se redujo un 15% en el primer semestre del pasado año, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En último lugar, los diplomáticos también destacaron la importancia de la “movilidad de talentos”, que supone este acuerdo, así como la necesidad de exponer la cultura en las agendas bilaterales, ya que este aspecto es considerado una “asignatura pendiente” en las relaciones entre países