Comienza el debate

Ante la presencia de más de tres mil campesinos, voceros de las Zonas de Reserva Campesina, del Incoder y autoridades locales dieron inicio al tercer encuentro de ZRC. Mientras el gobierno pide ampliar las ya constituidas, las comunidades reivindican la necesidad de establecer más territorios bajo este mecanismo y dejan claro que este evento no es financiado por las Farc.

“Venimos a acompañarlos en la construcción del modelo de desarrollo que quieren”, señaló en San Vicente del Caguán la gerente del Incoder, Myriam Villegas. Con estas palabras, se dio por instalado el tercer encuentro de Zonas de Reserva Campesina, un mecanismo que se ha vuelto polémico por su discusión en la mesa de negociaciones entre el gobierno y las Farc.

Más de tres mil personas se concentran en este municipio para analizar la situación de las Zonas de Reserva y hacer sus propuestas, que se condensarán en una iniciativa programática que pretenden dar a conocer a los negociadores de La Habana.

En el acto de apertura, el alcalde de San Vicente del Caguán, Domingo Pérez, señaló que este mecanismo le apunta a la construcción de paz desde el territorio y reiteró su voluntad de que los diálogos en Cuba prosperen porque, según él, “el país se hubiera podido ahorrar mucho dolor”.

Pérez señaló que San Vicente del Caguán le sigue apostando a la paz, como cuando fue sede de los diálogos entre el gobierno de Andrés Pastrana y la guerrilla de las Farc entre 1998 y 2001. Tras este proceso, “el Caguán solo recibió estigmatización”, dijo el alcalde.

Luego la palabra fue para Javier Soto, vocero de la Asociación de Zonas de Reserva Campesina y dirigente de Amcop. Soto denunció un “doble discurso institucional”. Por un lado, según él, funcionarios del gobierno impulsan y promueven estas Zonas, pero por el otro se oponen a cualquier iniciativa de paz “que venga de los sectores sociales”.

El dirigente campesino enfatizó en la importancia de este mecanismo, que constituye “una defensa del territorio y de los recursos naturales, y una herramienta eficaz para luchar contra el desabastecimiento alimentario que vive el país”.

Por último, Soto respaldó la posibilidad de un acuerdo de paz entre el gobierno y la insurgencia y pidió la participación en la mesa de los representantes de la sociedad civil.

Posteriormente, la gerente del Incoder le dijo a los campesinos que “nadie les puede imponer el modelo de desarrollo que quieren”, y señaló que es a través de estos mecanismos donde se construyen las propuestas.

Villegas anunció que el gobierno pretende dar vía libre a la creación de la zona de Reserva Campesina del Cesar, por las prioridades en materia de seguridad de ese territorio. La funcionaria dejó claro que el gobierno quieren unas Zonas “abiertas a la capacitación, a la asistencia técnica y a la tecnología”.

Tras un tímido aplauso al discurso de Myiriam Villegas, los campesinos comienzan la discusión del encuentro. Entre los temas que se van a tratar están la mujer campesina y las ZRC, la reforma agraria, la relación entre la economía urbana y rural, y las propuestas de sustitución de cultivos.

Actualmente, existen 6 Zonas de Reserva Campesina en el país y cuatro más están en proceso de construcción. Los campesinos, que hacen parte de 50 organizaciones, esperan que esta discusión llegue a oídos de los negociadores y que sus iniciativas hagan parte del acuerdo agrario que están a punto de concertar.