En medio de la contracción que muestra la economía y de las tendencias que vienen desde 2012, el sector de la construcción le apuesta a una mejor dinámica por las políticas del gobierno en materia de vivienda y a la caída de las tasas de interés hipotecarias.
En diálogo con Confidencial Colombia, la presidente de la Cámara Colombiana de la Construcción, Sandra Forero Ramírez indicó que al cierre del primer trimestre, el sector experimenta la misma contracción en los indicadores líderes de 2012, es decir que no hay dinamismo en lanzamientos, ventas e iniciaciones.
Aclaró que si bien hay contracción en esos mismos indicadores en los tres primeros meses de este año, es bueno precisar que como particularidad se pueden citar unas ventas que han venido mejorando, pero unos lanzamientos que no responden todavía, es decir que no hay reposición de la oferta.
Con ocasión del lanzamiento de la décimo segunda versión de expoconstrucción, la dirigente gremial afirmó que este renglón económico ya puede ser más optimista en lo que tiene que ver con ventas por toda la respuesta que ha tenido el público por la oferta de bajas tasas de interés para la adquisición de vivienda.
“Por el lado de la industria, en 2012 no hubo crecimiento y el primer trimestre de 2013 sigue con crecimiento negativo”, expuso la señora Forero.
Agregó que la compleja situación que muestra la economía hoy se podrá superar, no solo con el esquema gubernamental de las 100.000 viviendas sino con el Programa de Impulso a la productividad y el empleo (PIPE) que está diseñado para que mejoren los indicadores de la industria y para volver a los buenos reportes de producción y ventas.
La presidente de Camacol expresó que para tranquilidad del gremio y del país, hay un Gobierno comprometido que le inyecta recursos, política y decisiones a la vivienda con lo cual se recuperan de igual forma los indicadores sociales.
“Con la entrada en vigor del TLC con Estados Unidos y con otros convenios comerciales, más la tozudez de los empresarios, podemos pensar en que tendremos un buen 2013. Lo anterior, obviamente, de la mano del ejecutivo”, consideró.
Forero dijo que Colombia sigue siendo una nación con una actividad atractiva que conserva la buena fama y el prestigio de sus insumos, como es el caso de la cerámica y otros productos de la construcción que son demandados en volumen importante por el mercado internacional. Todo lo anterior, manifestó, podrá corroborarse con la macro-rueda de negocios impulsada por Proexport, Camacol, Corferias y Prodiseño.
Sobre el déficit habitacional afirmó que en los indicadores cuantitativo y cualitativo hay más de tres millones de hogares con esa carencia. “Nosotros miramos mucho el déficit cuantitativo en donde hay un faltante de 1.8 millones de hogares y es por eso que promovemos con gran empeño la producción de vivienda a gran escala porque estamos hablando de familias que no tienen vivienda”.
Bajas tasas dinamizarán el mercado
La vocera de los constructores colombianos dijo que por fortuna la oferta de bajas tasas de interés para el frente hipotecario indexará la economía y puntualmente al sector de la construcción en donde ya se nota el mayor dinamismo y un aumento en el pretensión de compra.
Esta coyuntura moverá no solo el mercado de la VIS y la VIP sino que llegará a todas las capas sociales toda vez que hay opciones para las familias con ingresos de entre uno y dos salarios mínimos para las cuales fue diseñado el programa de las 86.000 viviendas que tienen también el componente de crédito con subsidio a la tasa. Para el resto de la Vivienda de Interés Social, es decir hasta 135 salarios mínimos, casi 80 millones de pesos, también hay subsidio a la tasa.
“Lo estupendo es que la vivienda no VIS que está en rangos de precio entre los 80 y los 200 millones de pesos, también es objeto del mismo subsidio. Lo bueno, también, es que esos desembolsos empezaron a darse desde el pasado seis de mayo. No hay que olvidar que por encima de ese rango, las tasas han bajado por cuanto están en el nueve por ciento y con tendencia a bajar por la sana competencia interbancaria”, apuntó Forero.
Los anhelos de la construcción
Para la presidente ejecutiva de Camacol, Sandra Forero, hay leyes del sector vivienda como la de arrendamientos que pudieran dar mejores opciones para la industria de la construcción. En primer lugar, dijo, sería maravilloso contar con mecanismos que les permitan a los constructores edificar para arrendar.
Anotó que la figura apunta no a un arriendo con opción de compra sino específicamente a comprar para arrendar como en los esquemas de asociaciones público-privadas que tiene el gobierno británico en donde nunca sobre la vivienda en renta se generará la figura d propiedad. Lo que se hace, explicó, es una rotación de inquilinos en lazos muy largos de tiempo, pero quien se encarga de las mejoras y de la optimización de las áreas comunes es el constructor. “Esta propuesta se la llevaremos al Gobierno, tratando de que se pueda lograr”.
En segunda instancia se contemplan garantías para el arrendador, entendiendo la protección al arrendatario, lo cual conllevará a dinamizar este frente económico y a propender por futuros dueños que decidan hacer uso de la opción de compra.
“Si hay dificultades deben haber pólizas o cubrimientos de riesgo en el caso de que el inquilino no cumpla con el pago del canon”, dijo.
Colombia urge de suelos
A criterio de Camacol, Para que todo lo propuesto en vivienda sea una realidad debe haber suelo habilitado y ahí se depende, expresó, no del Gobierno nacional, sino de las administraciones municipales y distritales. “Necesitamos aumentar la oferta, necesitamos que así como se dinamizan las ventas, se dinamice la reposición de la oferta. Requerimos de más lanzamientos y más suelo con normas estables, agua potable y saneamiento básico”.
Sentenció que sin normas y sin suelo, muy seguramente la carrera la ganará la informalidad en las ciudades, que es lo que ha pasado históricamente.
“Nos quedamos en el qué, pero nos ha faltado entender el cómo, es decir si serán acciones públicas o privadas para mejorar la oferta de vivienda, pero lo urgente es que las cosas se hagan, el asunto es hacer o dejar hacer”, declaró.
No hay burbuja
Camacol reiteró que es imposible hablar de burbuja en el sector de la construcción. El gremio manifiesta de igual manera que la industria tiene todos los controles para evitar que el lavado de dinero se filtre en el sector. Expuso que por el volumen de construcción, se puede asegurar que las construcciones no se están haciendo con dinero del narcotráfico. “Los constructores se están cuidando en salud, por tal motivo no hay ventas para un mismo propietario de varias unidades en un edificio”.
Consideró importante todo lo que hace el Gobierno y los organismos de control para defender la formalidad y la transparencia en la propiedad. Lo propio, dijo, hace la industria y los bancos que cumplen una función de filtro admirable.
En su sentir, la compra de tierra ha tenido unos procesos muy complejos en Colombia y en la misma propiedad de bienes raíces.
“Implementar más controles, sin duda, permitirá que el sector quede libre de la duda en algún proyecto. Si hay algo irregular se da en un porcentaje relativamente mínimo, si es que se puede afirmar una cosa de tal gravedad”, comentó.
Ojo con las mafias de la tierra
La presidente de Camacol, dijo que lamentablemente aún operan en Colombia carteles de la tierra que se dedican a robar propiedades, a invadir terrenos y a comercializar lotes engañando a terceros.
“El tema de esas mafias de robos de lotes conllevó a que Camacol impulsara una serie de foros nacionales en donde se explicará que tipo de cuidados y prevenciones se deben tener para evitar ser víctima de actuaciones delictivas con la venta de terrenos espurios o adquiridos de manera irregular”, concluyó.