Luego de que el Gobierno Nacional vendiera Isagen, la segunda generadora eléctrica más grande de Colombia, la Contraloría General iniciará una auditoría especial sobre la venta.
Según, el contralor general Edgardo Maya Villazón, la auditoría permitirá determinar los efectos fiscales de la venta y si se produjo daño por esta operación.
“Debido a que la Constitución de 1991 suprimió la función que tenía la Contraloría de realizar un control previo a cualquier proceso de venta de entidades estatales, comenzará esta semana con un proceso para auscultar si la venta de Isagén se hizo sin inconsistencias”, señaló el Contralor.
El pasado 13 de enero, Isagen fue vendida a la empresa canadiense Brookfield Asset Management, un fondo de administración de activos, por 4.130 pesos por acción, lo que significó una operación de $6,48 billones, es decir 2.011 millones.
De otro lado, el Contralor dijo que la entrada en operación de la Refinería de Cartagena (prevista para el primer trimestre de este año) solo cubre la demanda de gasolina hasta 2019 (3 años más) y no alcanza a cubrir la demanda de Diesel (ya hay déficit).
Por eso, mañana la Entidad iniciará una Auditoría Especial ante la firma Reficar, para revisar aspectos como los mecanismos de contratación y subcontratación, la realidad de los controles que se aplicaron y, en general, para verificar el impacto fiscal de las inversiones realizadas.