Corea del Sur y Corea del Norte reanudaron este viernes sus contactos telefónicos a través de la línea de enlace de la Cruz Roja -cuyo cierre en marzo interrumpió las comunicaciones bilaterales- en un nuevo paso hacia la distensión tras varios meses de tiranteces.
“Corea del Norte estableció una conexión esta tarde” a través de esta línea, indicó a Efe una fuente del Ministerio de Unificación de Seúl, que sugirió que el contenido de este primer contacto se limitó a confirmar la restauración del citado canal.
Pyongyang anunció este viernes la apertura de esta línea de comunicación, la única que actualmente mantienen los dos países, al tiempo que propuso al Sur una reunión preliminar para este domingo en la localidad de Kaesong que precederá a próximas negociaciones para resolver temas pendientes.
En este sentido, el Gobierno surcoreano envió a su contraparte del Norte un fax para confirmar que acepta mantener este domingo el encuentro bilateral, aunque propuso que tenga lugar en el lado sur de la fronteriza Aldea de la Tregua de Panmunjom.
La cita del domingo sería “un primer contacto entre autoridades de ambas partes antes de las conversaciones a nivel ministerial” propuestas por el Gobierno surcoreano para el próximo miércoles en Seúl, indicó un portavoz del régimen de Kim Jong-un.
Corea del Norte abandonó ayer su habitual retórica beligerante para mostrar una postura más conciliadora e instó al Gobierno surcoreano a retomar el diálogo para tratar la normalización de proyectos conjuntos.
El complejo industrial de Kaesong, paralizado desde hace dos meses, y el turístico de Kumgang, detenido en 2008, son los dos principales proyectos intercoreanos conjuntos que ambas partes tratarán de reiniciar mediante las próximas negociaciones.
Tras recibir ayer la oferta norcoreana de diálogo, Corea del Sur pidió un encuentro entre representantes de ambos Gobiernos el próximo 12 de junio en Seúl, en una cita que también abordará previsiblemente los encuentros entre familias separadas por la guerra, interrumpidos en 2010.