En el marco de la segunda Muestra de Cine Español, se presentará “Dalimatográfo”, un documental que explora las intensas, y a veces frustradas, relaciones del genio catalán con el cine.
Desde 1931, Salvador Dalí vivió obsesionado por hacer cine. Su larga producción literario-cinematográfica no es más que una muestra de su pasión frustrada por el cine, ya que sus obras nunca fueron impresionadas en celuloide. El documental recoge además de estas obras inéditas, testimonios y declaraciones, las colaboraciones de Dalí con Hitchcock, Walt Disney, los hermanos Marx y sobre todo con Buñuel, con quién le unía una gran amistad.
Por ello, “Dalimatográfo”, el documental producido por la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales y la Fundación Gala-Salvador Dalí explora “la pasión y el amor” que sintió el pintor por el séptimo arte, una relación “mucho más profunda de lo que se había considerado hasta ahora”, según explicó ayer Montse Aguer, comisaria del Año Dalí.
Dalí, que entendía el cine como “un lenguaje de masas”, llegó a engendrar doce guiones cinematográficos -documentados al menos hay siete u ocho- que nunca llegaron a realizarse porque “su mente volaba tan alto y tan lejos que le faltaba un apoyo práctico para llevarlos a cabo. Siempre estuvo cincuenta años por delante de la sociedad y de la tecnología”.
Más información: http://www.muestradecineespanol.com/2013/