Diez prendas por las que no pasan los años

Temporada tras temporada, la moda se encarga de imponernos lo que se lleva y lo que no. Sin embargo, no hace falta estar al tanto de las tendencias para acertar en estilo. Tan sólo hay que recurrir a unos cuantos básicos. Y es que más allá de ‘little black dress’, la camisa blanca, los jeans o el pantalón de sastre, hay prendas que están por encima de todo. Diseños tan perfectos que no entienden de estaciones y que cada año se reinventan para recordarnos que están más vivos que nunca. ¿Quieres saber cuáles son?

Los levi’s 501

En mayo se cumplieron 140 años del nacimiento de una de las prendas de moda más auténticas e icónicas de todos los tiempos: el Levi’s 501. Cuando en 1873 Levi Strauss y Jacob Davis patentaron sus pantalones de trabajo con remaches en los bolsillos para los pioneros del Oeste americano, no podían imaginar la repercusión que tendría en la moda y la cultura moderna. Desde presidentes hasta estrellas de cine, su influencia ha estado marcado por las personas que lo han vestido, amado y re-imaginado.

La beisbolera

El uniforme del deporte americano por excelencia se cuela cada año en nuestro armario sin que siempre nos demos cuenta. La mitica cazadora de béisbol de los años 50 que nos conquistó en los 70 con ‘Grease’ y terminó de enamorarnos en los 80 con ‘regreso al futuro’ vuelve a colocarse este invierno. Taylor Swift, Rihanna o Lana del Rey ya se han encargado de adelantárnoslo.

Los bolsos ladylike

Este tipo de bolsos propios del New Look de Dior representan la elegancia clásica y la vuelta a la imagen femenina después de la segunda guerra mundial, una recuperación del lujo y el exceso tras la depresión. El bolso ‘mademoiselle’, portado de forma refinada flexionando el brazo o cogido de forma estratégica con las falanges encuentra su máxima expresión en el modelo Lady Dior, que cambió de nombre porque ella se encargaría de convertirlo en ícono.

Los converse

Las nuevas ‘sneakers’ retoman los detalles de las zapatillas de la época en que converse se convirtió en un verdadero ícono entre las celebres figuras del Rock & Roll, conocidos ‘skateboards’ y legendarios jugadores del baloncesto. Chuck Taylor no solo se convirtió en embajador de la firma sino que le puso nombre al modelo más emblemático. Hoy en día, nostálgicos y ‘fashionistas’ comparten su pasión por las All Star.

Las chaquetas montero

Es otra de esas prendas que no pasan de moda y que resutan imprescindibles en cualquier ropero. Un básico que le debe su fama a Marlon Brando, quien apareció por primera vez en la gran pantalla con una cazadora que pronto sería mundialmente conocida, la Schott Perfecto 613 One Star. Las chaquetas monteras han evolucionado del cuero a la loneta o al ante y se han llenado de color. Hoy es una prenda ideal para combinar tanto con vaqueros como con vestidos.

La falda tubo

Este corte ya se insinuó a finales del siglo XIX, cuando las largas faldas se entallaron siluetiando la figura femenina. Pero fue tras las guerras y la recesión cuando la prenda se acortó y liberó a las mujeres. La de tubo es la falda clásica por excelencia.

Los stilettos

Hay quien asegura que Marco Polo trajo los primeros zapatos de tacón enredados entre la pasta y las especies en su primer viaje a China. Otros creen que Leonardo Da Vinci los esculpió. Lo cierto es que desde que aparecieron, los tacones robaron la atención de las mujeres que, desde entonces, no se bajan de ellos. Los de aguja o stilleros son el verdadero ‘must have’ de estilo de las más femeninas. Cuanto más altos mejor.

La chaqueta de Tweed

Como contrapunto al estilo restrictivo de los años 50, Chanel impuso un traje de chaqueta de elegancia desenfadada, masculino-femenino. Pensado para las mujeres libres y activas, para el día y la noche, este atuendo apostaba por el confort y la fincionalidad. Con el traje apareció la chaqueta de Tweed, una prenda que no pasa de moda y que no se parece a ninguna otra: recta, estructurada, cerrada de arriba abajo. Gracias a Lagerfeld, esta ocupa hoy en día un lugar único en el vestuario plantario de la moda: el de un básico del lujo con múltiples adaptaciones lowcost.

Las gafas de aviador

Diseñadas originalmente por Bausch & Lomb, pero producidas por Ray Ban, estas gafas de lentes en forma de lágrima fueron inicialmente desarrolladas en la segunda guerra mundial para suplir a las gafas protectoras que usaban los pilotos de aviación, de ahí el origen de su nombre. Ray-Ban produjo el primer par en 1936 para las fuerzas armadas de estados unidos, por lo que fueron llamados Ray-Ban Aviators. Este mítico modelo recobró la popularidad en los 80 gracias a Tom cruise en ‘top gun’ y a Stallone en ‘Cobra’.

La gabardina

Yves Saint Laurente fue el primer diseñador en llevarlas a la pasarela en 1968, aunque su origen viene del guardarropa militar. La gabardina es una prenda camaleónica: sirve tanto para el día como para la noche y funciona muy bien en diversos colores. La clásica y la que combina con todo es la caqui.

Tomado de el Confidencial