El republicano Donald J Trump, la mente más prolífica en insultos de todo el mundo–quizás solo comparable con algún político del Centro Democrático en Colombia- ganó dos de los cinco estados en disputa: Kentucky y Louisiana durante las elecciones de este fin de semana en USA, pero perdió dos estados clave: Kansas y Mine con el senador por Texas, Ted Cruz y, peor aún, más de 15 puntos porcentuales en las encuestas generales a la presidencia.
Algo muy preocupante si se tiene en cuenta que estamos a menos de quince días de disputar estados determinantes como Michigan o Florida.
Y es que las críticas sobre el magnate de los negocios no cesan, esta semana, además, de Mitt Ronney, excandidato a la presidencia en el 2012, otras voces en el G.O.P (dirección del partido republicano) se alzaron en su contra y lanzaron un movimiento todos contra Trump. Algo así como lo que armaron contra Serpa los políticos colombianos a principios del siglo XXI y que, a la postre, le impidió al bigotudo llegar a la presidencia.
Habrá que ver si en tierra ‘gringa’ funciona como ocurrió aquí, sin embargo, parece poco probable porque Trump sigue siendo muy fuerte en aquellos lugares donde las elecciones dependen directamente de los ciudadanos, en contraste, a donde las elecciones dependen de las decisiones de asambleas (caucus).
En todo caso, Ted Cruz, se creció y ya muchas personas consideran la probabilidad, hasta hace un par de semanas remota, que sea el hombre para detener a Trump. “Marco rubio se murió” -repetían algunas voces autorizadas en la campaña del texano con el fin de atraer los votantes del muerto. Al tiempo que los donantes del retirado Jeb Bush anunciaban sus jugosas contribuciones a Cruz.
Tanto de Rubio como de Kasich, Trump reclamó la resignación: “están acabados, han perdido de una manera humillante, y deberían dejar la contienda”.
Algo que parece difícil de conseguir, del primero, porque ganó las primarias en Puerto Rico y, además, porque su orgullo es bastantes veces más grande que él y preferirá llegar hasta el final de las primarias antes que renunciar y permitir que el partido se unifique en contra de Trump como lo reclaman a gritos la mayoría de los republicanos. De cualquier forma Rubio pierde en las encuestas incluso en Florida, su estado natal, y por más de 20 puntos.
Y del segundo, porque recibió este fin de semana algunas adhesiones significativas, entre ellas, la del exgobernador de California, Arnold Schwarzenegger, más conocido por estos lares como Terminator. Y, además, porque el buen gobernador de Ohio espera las primarias en su estado donde las encuestas lo dan como seguro ganador.
A Hillary le fue mal, porque aunque ganó uno de los 4 estados en disputa, y conserva un cómodo liderato en la elección, en los lugares donde perdió lo hizo por una abrumadora mayoría y ya se comienza a ver débil en los estados que aún esperan la elección. En menos de una semana será la primaria de Michigan y la Exsecretaria de Estado del presidente Obama no parece estar en la mejor condición.
Vale la pena decir que es bien difícil, sin embargo, para Sanders remontar la diferencia, fundamentalmente debida a que casi todos los 717 súperdelegados –delegados que elige el partido demócrata a dedo- manifestaron ya su decisión de votar por la Clinton en la convención del partido.
Lo que sigue:
Primarias Republicanas:
Marzo 8
Hawaii Caucus (19 delegados en disputa).
Idaho (32)
Michigan (59)
Mississippi (40)
Marzo 12
District of Columbia Caucus (19)
Guam Republican Convención (9)
Primarias Demócrata:
Marzo 8
Michigan (147)
Mississippi (41)