El estilo años veinte llenará mañana la localidad francesa de Cannes con el glamur propio de las estrellas de Hollywood representado por Leonardo DiCaprio y Carey Mulligan, protagonistas de la nueva versión del clásico de Scott Fitzgerald, que abrirá la 66 edición del festival.
DiCaprio y Mulligan, junto al director de la película, Baz Luhrman, y otros compañeros de reparto, como Tobey Maguire, protagonizarán la primera alfombra roja de Cannes, símbolo inalterable de la cita más importante del año en el mundo cinematográfico.
Fuera de competición, “El Gran Gatsby” (“The Great Gatsby”) inaugurará las proyecciones de una edición que cuenta con 20 cintas en la competición oficial por la Palma de Oro y muchos otros estrenos que levantan igual o más expectación en las secciones paralelas.
Es el caso de “Muhammad Ali’s Greatest Fight”, de Stephen Frears, que narra la lucha del boxeador contra el Gobierno de Estados Unidos por la guerra de Vietnam, o de “Blood Ties”, del actor y director francés Guillaume Canet, en su primer largometraje en inglés.
O de algunos de los homenajes que ha organizado el festival para esta edición, como el dedicado al veterano Jerry Lewis, que, a sus 87 años, estará en la presentación de “Max Rose”, película que protagoniza, o a Kim Novak, con la proyección de una copia restaurada de “Vertigo”, de Alfred Hitchcock.
Pero en lo que a la competición se refiere, la lucha se presenta muy reñida para conseguir la preciada Palma de Oro.
Roman Polanski (“La Vénus a la fourrure”), los hermanos Coen (“Inside Llewyn Davis”), Nicolas Winding Refn (“Only God forgives”), Alexander Payne (“Nebraska”) o François Ozon (“Jeune et jolie”) parecen partir con cierta ventaja, pero hay muchos nombres que, a priori, son serios candidatos a premios.
Como el iraní Asghar Farhadi, que llega con “Le passé” y al que precede el éxito de “Nader y Simin. Una separación” (“Nader and Simin. A Separation”), película con la que logró el Óscar a la mejor película de habla no inglesa y el Oso de Oro de Berlín, o Steven Soderbergh, que lleva meses anunciado su retirada del cine con “Behind the candelabra”.
También los japoneses Hirokazu Kore-Eda con “Soshite chichi ni naru” y Takashi Miike con “Wara no tate”; el estadounidense James Grey, con “The Inmigrant”, o el mexicano, aunque nacido en Barcelona, Amat Escalante, con la única película en español en la competición, “Heli”.
Jim Jarmush, Paolo Sorrentino, Jia Zhangke, Alex Van Warmerdam, Abdellatif Kechiche, Mahamat-Saleh Haroun y el resto de la armada francesa: Arnaud des Palliéres, Arnaud Desplechin y Valeria Bruni Tedeschi, completan los 20 nombres de la competición.
Quién consiga la Palma de Oro o los premios de dirección e interpretación depende en exclusiva de un impresionante jurado, presidido por Steven Spielberg y que forman además los realizadores Ang Lee, Cristian Mungiu, Naomi Kawase y Lynne Ramsay y los actores Christoph Waltz, Nicole Kidman, Daniel Auteil y Vidya Balan.
Más allá de la competición por los grandes premios, Sofia Coppola con “The Bling Ring” será la encargada de dar el pistoletazo de salida a “Una cierta mirada”, la segunda sección en importancia del certamen francés, que cada año trata de sorprender con propuestas especiales y menos comerciales.
En este apartado se podrá ver también el último trabajo como director de James Franco (“As I lay down”); “Wakolda”, de la argentina Lucía Puenzo, con participación española en la producción y de Àlex Brendemühl como actor; o “La jaula de oro”, un filme mexicano del español Diego Quemada-Díez.
Pero además de las películas, los protagonistas de Cannes son las estrellas que pasean por la alfombra roja o por la Croisette. Protagonistas de filmes a competición como Marion Cotillard, Justin Timberlake, Michael Douglas, Matt Damon, Ryan Gosling, Kristin Scott Thomas, Tilda Swinton, Emma Watson, Bérénice Bejo, Clive Owen, Zoe Saldana, James Caan, F.Murray Abraham o John Goodman.
O estrellas que se acercarán a Cannes con otros fines. Como Sharon Stone, Naomi Campbell o Janet Jackson, que participarán en la gala contra el sida que organiza la asociación amfAR, o Liv Tyler, que presentará un corto homenaje al beso, dirigido por Wim Wenders, como parte de una campaña publicitaria.
Mientras, los paseantes inundarán la famosa Croisette, el paseo marítimo de Cannes, con la esperanza de cruzarse con alguno de sus ídolos, aunque en la mayor parte de los casos tendrán que contentarse con ver sus rostros en los enormes carteles que decoran los principales edificios frente al mar.
Con EFE