Según un estudio de la Universidad de Ohío (EE.UU), el idioma más difícil del mundo es el pirahán, una lengua que se habla en la Amazonía brasileña y que se basa básicamente en sonidos y entonaciones. El lingüista Rolf Theil, autor del estudio, estima que tardaríamos 10 años en aprenderla
El pirahán es un idioma cuya pronunciación es muy especial, un dialecto donde la entonación es muy importante. Por ejemplo, las palabras ‘amigo’ y ‘enemigo’ son las mismas, pero se diferencian aplicando una melodía distinta. Este idioma que hablan unos 350 nativos de una región cercana al río Maici, en la Amazonía brasileña, informa el portal Science Nordic.
Puede ser hablado, cantado e incluso silbado. De hecho, está basado en un conjunto de sonidos emitidos bajo silbidos que se transmiten a distancias considerables. Esto permite a los nativos orientarse de mejor forma al cruzar la espesa selva o los ríos y se convierte en una considerable ventaja para comunicarse bajo las torrenciales lluvias amazónicas.
Este difícil idioma únicamente utiliza verbos en tiempo pasado y futuro, pero pueden ser expresados ¡hasta en 65.000 diferentes formas! Además, no cuenta con sustantivos en su forma singular o plural. El contexto de la frase dirá si está hablando de una persona o de varias.
El pirahán solo tiene tres vocales y ocho consonantes, pero muchos sonidos específicos adquieren el significado de palabras enteras. Su transliteración puede ser detectada muchas veces de forma intuitiva, pero si se desconoce determinadas reglas del dialecto sería imposible transmitir una idea.
Los especialistas consideran que por su complejidad, el aprendizaje de este idioma le tomaría unos 10 años a una persona con una memoria promedio. Los expertos han encontrado un buen parecido entre muchos términos del pirahán con el inglés y el portugués. Sin embargo, una gran cantidad de estas palabras tienen un significado diferente, lo que dificulta aún más su aprendizaje.