Francisco de Roux ha venido trabajando incansablemente por las víctimas de la guerra en Colombia y ha sido uno de los más activos en dinamizar el acercamiento de la víctimas de las regiones a la mesa de diálogos de La Habana.
El sacerdote jesuita Francisco de Roux, con su hablar pausado y sus palabras escogidas y certeras ha sido uno de los pilares de las víctimas de la guerra en el Magdalena Medio. En 2014 se convirtió en una de las figuras más dinámicas al momento de visibilizar las problemáticas que plantea la guerra en el país y en la caracterización ante la mesa de diálogos de La Habana, de las víctimas del conflicto colombiano.
Este caleño, nacido en 1943, doctorado en economía de la universidad de la Sorbona y magister en economía de la London School of Economics, fue director e investigador del Cinep y fundador y director del Programa de Desarrollo y Paz del Magdalena Medio. La suya es una de las voces más autorizadas en lo que toca a la situación de la guerra en el país y el daño que genera en las estructuras sociales y comunitarias de la Colombia rural.