El aumento de la violencia en Siria, donde en un año y medio se ha pasado de la represión de protestas pacíficas a una guerra civil, llevó hoy a la ONU a anunciar que para fines de año serán 710.000 los refugiados sirios, siete veces más de lo que había calculado antes.
En la actualidad, 294.000 sirios han sido registrados como refugiados o están a la espera de cumplir esta formalidad en Turquía, Jordania, Irán y Libano.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) señaló hoy que el ritmo al que está creciendo el número de refugiados es abrumador y requiere un aumento rápido e importante del plan de ayuda humanitaria que estaba previsto.
En sólo seis meses, las previsiones sobre el número de refugiados sirios se han multiplicado por siete, sostuvo en una rueda de prensa el coordinador del ACNUR para Siria, Panos Moumtzis.
El pasado marzo, 41.000 sirios se habían convertido en refugiados y se trabajaba con una proyección de 100.000 para finales de 2012, pero esas cifras han quedado largamente superadas por la realidad.
Moumtzis explicó que “una enorme cantidad de refugiados sirios están cruzando las fronteras”, a un ritmo de 2.000 a 3.000 por día en los dos últimos meses.
“Estamos trabajando contra el reloj para que cada familia siria que llega tenga lugar de cobijo, agua y alimentos”, dijo el representante de Naciones Unidas, quien reconoció que la magnitud de las necesidad “es apabullante”.
“Muchos refugiados llegan sólo con la ropa que tienen puesta y algunos han sido desplazados varias veces (dentro de Siria) antes de abandonar su país”, agregó.
Las nuevas proyecciones contenidas en el segundo Plan de Respuesta Regional de la ONU para Siria, presentado hoy en Ginebra, apuntan a que Turquía llegaría a recibir 280.000 refugiados en diciembre próximo, Jordania, 250.000; Líbano, 120.000; e Irak, unos 60.000.
Sin embargo, Moumtzis lamentó que a pesar del considerable aumento de las necesidades, las agencias de Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales que trabajan en favor de los refugiados sirios apenas hayan recibido un tercio de la financiación requerida.
“Tenemos 141 millones de dólares de los 487 millones que se necesitan, lo que representa sólo el 29 %”, precisó.
De los refugiados registrados, el ACNUR ha comprobado que la mitad son menores y que una quinta parte todavía no ha cumplido los cinco años.
La composición de la población refugiadas por edades ha llevado a que la escolarización de los niños se convierta en una prioridad, así como su inmunización y que cuenten con vestimenta apropiada para la llegada del frío.
De hecho, la otra preocupación central de los organismos humanitarios gira en torno a la próxima llegada del invierno y a la necesidad de preparar las condiciones de los refugiados sirios a esta situación en vista de que la mayoría vive en tiendas de campaña.
Sobre la planificación para la recepción de los refugiados, el coordinador del ACNUR indicó que en Turquía ya hay trece campamentos y se planea que haya 16 en total, mientras que en Irak se está construyendo el segundo y en Jordania existe uno, aunque en este último país también funcionan “dos centros de tránsito que en realidad son como dos pequeños campamentos”.
En Líbano no existe aún ningún campamento y la gran mayoría de refugiados sirios viven en departamentos alquilados o con familiares.
Aunque la actual cifra oficial que maneja el ACNUR es de cerca de 300.000 refugiados, se cree que la cifra real se eleva a medio millón.
La diferencia, por el momento, se explica por las personas que cuentan con medios económicos para salir adelante solas y aquellos que simplemente no han pedido asistencia humanitaria, precisó Moumtzis.
