“El País ya no tiene fronteras, cuando viajo, yo soy el País”: David Manzur

David Manzur ocupa un lugar privilegiado en la historia del arte colombiano. Su trabajo ha logrado un grado de perfección que es difícil de alcanzar, no sólo por su bagaje conceptual, sino por la impecable técnica que siempre ha caracterizado sus obras.

Sus pinturas son el resultado de una búsqueda incansable de nuevos retos expresivos y nuevos contenidos, no obstante, siempre le han representado aquellas imágenes entre impresionantes y oníricas, entre maravillosas y premonitorias, que llevan al espectador a reflexionar sobre el estado del arte, su definición, su historia y a repensar el status quo del hombre.

Confidencial Colombia habló con el Maestro, para que con la misma visión privilegiada con la que ha captado las siluetas de la vida, de una manera simplemente sorprendente y auténtica, le cuente a nuestros lectores qué significa ser colombiano.

Confidencial Colombia: ¿Qué significa ser colombiano?

David Manzur: Tener los pies en la mejor geografía del Planeta.

C.C: ¿Qué es lo más valioso de ser colombiano?

D.M: Resolver problemas

C.C: ¿Ser colombiano influye en sus obras?

D.M: Si

C.C: Ya que el maestro ha tenido la oportunidad de estar largos periodos de tiempo en otros países del mundo, ¿cuál es la razón para quedarse en Colombia?

D.M: La gente.

C.C: ¿El lugar –Geográfico- en el que trabaja un artista afecta su obra?

D.M: En lo conceptual, uno refleja el medio en que está, por lo tanto, sí.

C.C: El maestro decía en otra entrevista, que en ningún lugar había trabajado tan bien como en Barichara, Santander ¿por qué? ¿Qué tiene de especial?

D.M: Porque Barichara tiene todo lo que otros lugares van perdiendo

C.C: ¿Qué siente cuando deja el país?

D.M: En realidad nada, el mundo cabe en el País

C.C: ¿Cuándo está fuera del país que es lo que más extraña de él?

D.M: El País ya no tiene fronteras, cuando viajo, yo soy el País

C.C: ¿Qué tiene de especial Colombia en comparación con los otros países?

D.M: Un ARCO IRIS de cien colores que se refleja en montañas, ríos y dos océanos. ¿Te parece poco?