El reencuentro entre Francisco Santos y Óscar Iván Zuluaga estuvo marcado por abrazos de reconciliación ante la prensa, alaridos de apoyo, y una visita a uno de los potreros más peligrosos de la localidad de Suba en el que Santos y Zuluaga tienen interes.
El barrio Villamaría, en la localidad de Suba, está dividido por un enorme potrero que a plena luz del día se puede transitar, sin embargo cuando llega la noche, dicen sus residentes, “es peligroso meterse pues usted se entra completico pero sale robado. Eso es tremendo atracadero”.
El lugar está repleto de desperdicios, plásticos, neumáticos quemados, escombros, excremento de animales e incluso de humanos. Delgados caminos lo trazan de lado a lado y por allí es donde cruza la gente. Ellos frecuentemente repudian los altos índices de criminalidad del sector y aseguran que por muchos años la situación ha sido igual.
Según la administración distrital, el espacio está proyectado para la construcción de un tramo de la Avenida Longitudinal de Occidente (ALO) y que debido a complicaciones de gestión se ha visto estancada.
Bajo este marco, el punto fue el idóneo para que en medio de denuncios de personas, gritos de aliento y la prensa, se reencontraron Óscar Iván Zuluaga y Francisco Santos, los fieles vasallos del uribismo que fueron distanciados luego de la victoria del exministro de Hacienda sobre ‘Pacho’ y Carlos Holmes Trujillo en la convención uribista.
“Siempre hemos estado unidos, fuimos parte de un mismo Gobierno (…) hemos defendido a Uribe y todo lo que hizo nuestro gobierno. No tengo sino cariño y admiración por él y le he dicho que lo necesitamos en esta lucha política”, dijo Zuluaga frente a un salón comunal de Villamaría, ubicado a pocas cuadras del potrero.
‘Pacho’ será jefe de debate de Óscar Iván y su entrada a la campaña presidencial pretende reforzar la apuesta electoral del Centro Democrático. El exvicepresidente precisó que su unión responde a un deber como miembro del uribismo para lograr llegar a la Casa de Nariño de la mano de Zuluaga. “Soy un uribista fiel, él es mi candidato”, anotó. Luego dijo que las presuntas irregularidades registradas en la convención -que de alguna manera le habrían causado problemas en su condición como precandidato- las dejará en el pasado.
En este orden de ideas, Santos planea difundir y ejecutar el plan para Bogotá concebido por la bancada, de tal forma que logre “recuperar a la ciudad” de la crisis institucional ahondada tras la polémica del alcalde Gustavo Petro. De igual forma aseguró que quiere mejorar –entre muchas otras cosas- el tema de la movilidad de la capital aplicando iniciativas como la ALO en sectores de difícil acceso como lo es Villamaría y su peligroso potrero.
La estrategia reivindicaría las labores que adelantó durante la revocatoria de mandato (suspendida tras la restitución de Petro) y validaría aún más el enunciado de que en efecto quiere ser el próximo alcalde electo de la capital.
“A el doctor Santos le duele la ciudad, él quiere mucho a Bogotá y por eso me siento feliz y honrado de estar con él en esta recta final. Esto es de corazón y hemos estado 12 años en esta batalla juntos, Tenemos un grán plan para la capital”, añadió Zuluaga,
Si bien el rencuentro estuvo marcado por abrazos de reconciliación y un fervor uribista, este no estuvo ajeno a polémicas, pues para varios sectores del país el camino político de Francisco Santos se mueve al vaivén de las posibilidades. También resulta misterioso que faltando menos de 20 días para las elecciones se haya oficializado la unión y no antes, cuando empezó en forma el ruedo electoral.
En todo caso, la llegada de ‘Pacho’ consolida una victoria para el uribismo de cara al 25 de mayo y vuelve a enfilar a los ‘tres huevitos’ de Álvaro Uribe Vélez a trabajar por la presidencia.