El encuentro entre Trump y Merkel dejó varios momentos incómodos delante de las cámaras. El presidente estadounidense comenzó ignorando el saludo a la canciller alemana en el despacho oval y prosiguió con su show en la rueda de prensa ante los medios.
Visitar la Casa Blanca va a pasar un show de late night como los que brotan en la televisión estadounidense en la medianoche. El encuentro entre Trump y Merkel no defraudó delante de las cámaras y brindó brillantes momentos entre ambos mandatarios.
El primero de ellos ocurrió en el despacho oval. Ante los focos, la presidenta alemana le preguntó a Trump si debían darse la mano, a lo que el excéntrico dirigente norteamericano respondió ignorando completamente la presencia de la canciller alemana.
Más tarde, en la rueda de prensa ante los medios el mandatario norteamericano brindó otro momento incómodo cuando le cuestionaron sobre la acusación de las presuntas escuchas que puso el expresidente Obama. “Al menos tenemos algo en común, quizá”, le sugirió Trump mientras señalaba a Merkel ante la cara de estupefacción de esta y las posteriores risas de los asistentes.
That face Angela Merkel made when Donald Trump said they’d both been wiretapped. pic.twitter.com/Un1trHTZfF
— Shannon Watts (@shannonrwatts) 18 de marzo de 2017
El encuentro volvió a tener su punto de discordia con el tema de la migración y las extremas políticas de fronteras que trata de imponer Trump. “La inmigración es un privilegio, no un derecho, y la seguridad de nuestros ciudadanos siempre debe estar en primer lugar”, dijo tajantemente el presidente estadounidense aunque aclaró “respetará las instituciones históricas y el derecho de las personas libres a dirigir su propio destino”.
Merkel quiso hacer aquí un apunte sobre el polémico veto migratorio de Trump “Debemos respetar nuestras fronteras y tenemos que trabajar en este asunto con nuestros vecinos por el interés mutuo. La inmigración y la integración deben ser tratados, los traficantes deben ser parados, pero ello debe hacerse en cuenta teniendo en cuenta los refugiados. Hay que darles oportunidades para que se desarrollen sus propias vidas en los lugares de donde son”.
