Los empresarios de la micro, la pequeña y la mediana empresa agremiados en ACOPI manifestaron su total pesar por el deceso del Presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, pero no escondieron su inquietud por el devenir del país patriota.
El presidente de ACOPI Nacional, Jairo Pulecio dijo en Confidencial Colombia que la muerte del ex mandatario venezolano es un hecho para lamentar toda vez que fue un líder y un ícono de la política social venezolana, sin embargo afirmó que su desaparición puede traer algunas repercusiones para las exportaciones colombianas con destino al vecino país y para el mismo engranaje de la frontera que se ha venido afectando por varios motivos.
“Esperamos que el periodo de transición sea lo menos traumático y que los venezolanos tomen la mejor decisión para que Venezuela tome el rumbo que todos en esa nación merecen”, declaró el señor Pulecio.
Dijo que los temas binacionales y los temas pre acordados se tendrán congelados hasta que termine el proceso de transición. “Muy seguramente vendrá un periodo de anarquía porque los líderes que hacían parte del chavismo querrán retomar el poder y obviamente habrá reacciones en la oposición”.
Para el dirigente gremial las cosas se pueden enturbiar en el vecino país por la muerte de un líder de las magnitudes del Presidente Chávez toda vez que sus allegados querrán el poder, generando incertidumbre en el país. Pulecio expresó toda su solidaridad con los venezolanos y afirmó que lo más deseable es una salida rápida, pacífica y constitucional para devolverle la institucionalidad a Venezuela.
“Esperamos un pronto restablecimiento del orden en Venezuela, primero por el bien de un país hermano y segundo por Colombia, nación que depende social y económicamente del vecino”, conceptuó.
La frontera, ese tercer país, espera que las cosas mejoren para bien de los dos países porque la zona de frontera en su opinión ha estado en un mar de dudas y desventajas económicas expresadas en el diferencial cambiario, en el contrabando y en otros aspectos que laceran la región fronteriza.
“Esperamos que el nuevo gobernante que llegue, sea quien sea, trate de mejorar las relaciones binacionales, de retomar una agenda de doble vía y le de esa confianza que tanto pide la zona de frontera, que finalmente es la que paga los platos rotos de los distanciamientos”, aseveró.
Exportadores extrañados
El presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (ANALDEX), Javier Díaz Molina precisó en este medio que el deceso del Presidente Chávez lo recibe el gremio con sorpresa porque no se tenía una información clara y precisa sobre el estado del Mandatario. “Solo hasta esta mañana se escuchó que se había agravado y ya en la tarde se conoció la luctuosa noticia que repito nos tomó por sorpresa”.
Consideró que el futuro de las relaciones comerciales entre Colombia y el vecino país dependerá en gran medida de la decisión que tomen los venezolanos sobre su futuro político y de nuevo gobierno. “Hay que esperar si los vecinos deciden darle largas a la continuidad o prefieren irse por la vía del cambio, pero eso es algo que no sabemos y que obviamente genera expectativa por el rumbo que tomará Venezuela y por el impacto que el devenir traiga sobre Colombia”.
Agregó que la posición de Colombia debe ser de prudencia y hermandad, esperando con respeto que los venezolanos tomen una decisión.
Indicó que el cambio geopolítico en América Latina con el escenario de Venezuela dependerá única y exclusivamente de las determinaciones que adopte el pueblo venezolano.
Cabe anotar que en 2012 Colombia exportó a Venezuela algo más de 2.000 millones de dólares, cifra que se podría repetir en 2013. De todas maneras queda el recuerdo, nostálgico de las ventas de 2008 que superaron los 6.092 millones de dólares.