En un hecho sin precedentes, el gobierno de España presentó una nota de protesta ante la cancillería de Colombia por “discriminación y trato arbitrario” a la inversión de ese país en el nuevo puerto de Buenaventura.
La extraordinaria medida diplomática es producto de una decisión de la capitanía del puerto de la Dirección Marítima Nacional, Dimar, en cabeza del almirante Ernesto Durán, de restringir el ingreso de buques de mas de 280 metros de eslora al puerto TCbuen, uno de los terminales marítimos más modernos del país, inaugurado hace un año y cuya construcción acarreó una inversión de más de 250 millones de dólares.
El pasado 18 de Julio, cuando el Puerto TCbuen ya tenía compromisos comerciales con varias navieras, entre estas Maerks, la más grande en el mundo, y un par de buques navegaban con rumbo a Buenaventura, se encontró con la sorpresiva decisión de restringir el acceso de los barcos de este tamaño, con el argumento de que podía estar riesgo la seguridad portuaria.
Según los voceros de TCbuen, durante el último año habían atracado en el puerto más de 56 buques de más de 280 metros de eslora y algunos de hasta 296, sin que se hubiera presentado ningún percance, pero sobretodo, sin que la Dimar le viera ningún inconveniente.
TCBuen con una mayoritaria inversión extranjera y más 800 socios locales, tiene un contrato con la Maerks para recibir los contenedores en los que se mueve el comercio internacional que llega a Colombia y que promete ir en aumento de cara a los tratados de libre comercio.
Las dos empresas hacen estudios técnicos y consultan a los pilotos de maniobra, que son quienes “atracan” los barcos en los puertos. Los análisis concluyen que el nuevo puerto tiene las características que permiten el ingreso de buques más grandes y deciden entonces lanzarse a traerlos al pacifico colombiano.
Pero se encuentran con la decisión de la Dimar de exigirle a TCbuen, que se apliquen normas pianc, estándares internacionales que no han sido acogidos nacionalmente por ningún puerto del país.
Sin embargo no hace lo mismo con otros puertos a los que sí autoriza recibir los barcos sin que exista ninguna diferencia con TCbuen. Ésta es la razón que lleva a que la empresa española y ahora también su gobierno aleguen que hay un trato discriminatorio, prohibido explícitamente en el tratado de protección de la inversión.
“Es un golpe a la seguridad jurídica y a la confianza de los inversionistas en el Estado colombiano, no pueden invitar a los extranjeros a invertir y cambiar las reglas a la mitad del partido, saltándose los procedimientos legales.” Aseguró Camilo Gómez, representante jurídico de TCbuen.
Gómez asegura que existe una norma vigente desde el año 2010, que advierte a la capitanía de puerto, que si va a restringir un puerto tiene que seguir “un proceso administrativo que en este caso no se siguió.” Esta es la segunda razón de la nota de protesta, la arbitrariedad.
El articulo 3 del tratado invocado por España dice explícitamente: “Las inversiones realizadas por inversionistas de una Parte Contratante en el territorio de la otra Parte Contratante recibirán un tratamiento justo y equitativo y disfrutaran de plena protección y seguridad, no obstaculizando en modo alguno, mediante medidas arbitrarias o discriminatorias, la gestión, el mantenimiento, el uso, el disfrute y la venta o liquidación de tales inversiones.”
Esta tarde el almirante Duran debe presentarse ante la cancillería para explicar las razones que lo han llevado a sentar este precedente, que se ser como lo alega la empresa española y su embajada, podría dar al traste con el auge del comercio internacional que se requiere para el crecimiento del país.
