La protagonista de El Cartel de los Sapos, Juana Acosta, regresó al país y tuvo la oportunidad de ver por fin la cinta que rodó hace más de dos años.
No importa si está enfundada en una bata de médico, en un elegante vestido como la esposa de un empresario corrupto del sector inmobiliario, en las botas de una guía italiana de alta montaña o en un traje de época dándole vida a Manuelita Saenz… menos importa si los medios europeos hablan de los éxitos profesionales de Juana Acosta… en Colombia es y seguirá siendo siempre Juanita.
Esta caleña de dulce mirada almendrada es de esas personas que dejan huella. En el mundo sigue siendo de las actrices más reconocidas, aunque sus interpretaciones en el cine y la televisión se vean cada vez menos en nuestro país y que noticias tan buenas como el premio que acaba de recibir, por parte del Sindicato de Actores por su participación en la serie Crematorio, no se conozcan.
Crematorio, 11’6, Libertadores, Carlos, Familia, Hospital Central, Hispania La Leyenda, Con amor y sin amor… son apenas algunas de las producciones en las que ha participado recientemente. Ahora regresa en la piel de Sofía, de la mano del director Carlos Moreno y al lado de Manolo Cardona, el otro caleño, con quien protagoniza El Cartel de los Sapos. “Este fue un regalo que esperé por 10 años, coincidir con Manolo Cardona, Robinson, Julián, el Flaco Solórzano… me lo disfruté mucho”, asegura emocionada.
“¿Anécdotas en el rodaje? Muchas. Quizá la menos divertida es que terminé hospitalizada durante una semana porque venía con unos picos de estrés muy fuerte, pero además de eso puedo decir que me gocé todo el rodaje”, cuenta la actriz cuyo personaje la llevó, junto a la producción, a Cali, Buenaventura, Bogotá, Miami y Nueva York.
Sobre la esencia de Sofía, Juana asegura que lo que más le gusta es que no es una mujer tonta, ni sumisa. “Es un personaje real, una niña bien de la alta sociedad caleña de los años 90 que se metió con un narcotraficante, en contra de la voluntad de sus padres, de su círculo, a sabiendas que se podía joder la vida”.
La actriz explica que el amor de Sofía y Martín más que ciego es trágico, “en la adolescencia nunca les permitieron estar juntos por la diferencia de clase que los separaba, pero ella siempre supo que él se movía en aguas peligrosas, solo que necesitaba que él se lo reconociera. Cuando lo hizo ella se entregó a él sin red, en contra de su familia y del ‘que dirán’ en un país donde esto tiene mucho valor”.
Esta época de violencia que se recrea en El Cartel de los Sapos y las situaciones que provocaban los miembros del Cartel del Norte del Valle en el país y especialmente en Cali, su ciudad natal, no le son desconocidas.
“Yo me fui de Cali en el año 1994, cuando la ciudad pasaba por un momento muy complicado como la guerra de los carteles y el narcoterrorismo contra el gobierno, esto se veía reflejado en absolutamente todo. Yo no había visto la serie y estaba muy ajena a la historia del libro, por eso cuando Manolo me llamó ofreciéndome el personaje inmediatamente lo compre, lo leí y pensé: Esta historia representa una época en mi país que yo conocí por lo tanto la entiendo ¡Quiero hacerla!”
Confiesa que el género narco no es el que más le gusta pero asegura estar a favor de que este tipo de historias se cuenten, por muy dolorosas y fuertes que sean. “Creo que cada país refleja en sus películas sus conflictos y esta es una película real de lo que vivió Colombia. No nos estamos inventando nada, lo importante es no abusar”.
Afirma que una película como El Cartel de los Sapos no se había hecho en Colombia. “Creo que la película da un paso importante en cuanto a factura, la encuentro impecable. Esto ya se respiraba en el rodaje y tiene mucho que ver el engranaje que se logró entre el equipo técnico y actoral, lo que poco pasa en una producción, todos caminábamos hacía el mismo lado”.
Este engranaje tiene mucho que ver con el trabajo del director Carlos Moreno de quien Juana afirma: “Carlos es un director con un enorme talento. Soy muy afortunada de haberlo conocido, tuvimos una conexión buenísima”. Sobre el trabajo con los actores asegura: “Hizo un muy buen trabajo, evitando que algunos personajes se volvieran caricaturescos. Logró llevarnos a todos a un tono preciso que dio como resultado una película coral”.
La cita con Juana es el próximo 28 de septiembre cuando la cinta se estrene en las salas de cine de Colombia.
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