Apagando luces en la Casa de Nariño (sede de la presidencia), el gobierno colombiano adoptó medidas para promover ahorro en el consumo de energía eléctrica y lograr un uso racional y eficiente por parte de los consumidores en las actuales circunstancias del país.
Para ello se adicionó el Decreto Único Reglamentario del Sector Administrativo de Minas y Energía, 1073 de 2015, con el fin de adoptar medidas tendientes a garantizar la prestación eficiente del servicio público domiciliario de energía eléctrica en circunstancias extraordinarias.
Dicho decreto único fue adicionado autorizando a la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG), para que adopte de manera temporal las medidas regulatorias que sean necesarias para tal fin.
“En desarrollo de lo anterior, la CREG podrá ajustar las fórmulas tarifarias para establecer un esquema diferencial que promueva el ahorro en el consumo de energía por parte de los usuarios”, precisa el nuevo decreto.
La medida se adoptó minutos después de que el Presidente Juan Manuel Santos anunciara en la Casa de Nariño medidas para enfrentar los efectos ocasionados por el Fenómeno del Niño, el peor en los últimos 35 años, así como situaciones de emergencia presentadas en centrales eléctricas.
De acuerdo con el decreto, es deber del Estado asegurar la prestación eficiente de los servicios públicos a todos los habitantes del territorio nacional.
Premios y castigos
Además de los anuncios, la Casa de Nariño publicó una lista de incentivos planteados por el mandatario colombiano.
Por cada peso que ahorre del consumo promedio un hogar recibirá otro peso como incentivo.
Si consume un peso más que el promedio se le cobrará el doble.
Es decir, el que ahorre más ganará más y el que desperdicie más pagará más.
Para los grandes consumidores se dará un incentivo para que generen su propia energía y sustituyan la que le compran a la red.
Para quien tenía una planta era mejor negocio comprar energía de la red que generarla.
Ahora se va a pagar a un precio que haga que sea mejor generarla.