El gobierno del departamento de Boyacá manifestó que no son pocas las preocupaciones como consecuencia de la caída en los precios internacionales del carbón, mineral que representa uno de los principales ingresos por regalías para la región. Para el caso del carbón coquizable, producto bandera de la tierra patriota, sus precios cayeron a menos de la mitad.
El secretario de Minas y Energía de Boyacá, Wilson Sánchez le precisó a Confidencial Colombia que el menor ingreso por ese factor es de más de 20.000 millones de pesos, escenario que impidió inclusive que fueran adelantadas las implementaciones de seguridad para contar con minas en producción bien dotadas, seguras y con ventilación que brinden la mayor confianza para los extractores de piedra negra.
Según el funcionario, el tema de regalías es tan complejo que para 2011 fueron girados 54.000 millones de pesos, de los cuales el 60 por ciento llegaron por carbón. Para este año los productores y la Gobernación esperan una mejoría en los precios.
“Con el nuevo sistema tenemos que ser más diligentes en los proyectos y poner ojo avizor en los fondos nacionales porque ahora tenemos que compartir los recursos de la producción que finalmente castiga a los dueños de la riqueza. Lo que nos ofusca de las nuevas disposiciones es que todos los líos sociales y ambientales que deja la explotación minera o petrolera no se comparten y se quedan como un cáncer en la comarca con menos plata para enfrentarlos”, aseveró el señor Sánchez.
En 2011 el departamento de Boyacá recibió algo más de 141.000 millones de pesos en regalías de una expectativa de 74.000 millones, esa utilidad bajó a 54.000 millones de pesos, con el agravante que el tema de los commodities y en especial el precio del carbón va a la baja.
La situación no es fácil porque muchos prefirieron cerrar las minas que producir a pérdida, aspecto que se tradujo en una migración considerable de mano de obra minera y en la misma deserción escolar.
Explicó que la minería en el departamento es tan artesanal que en una investigación acompañada por la Universidad Nacional fueron encontrados hasta burros dentro de las minas tirando los malacates para sacar carbón, situación que obliga a pensar en fomento e industrialización.
En el tema de la esmeralda el asunto va bien, pero a criterio del Secretario, urge mejoramiento en la producción de piedra verde en el occidente de Boyacá que es donde se concentra la actividad esmeraldera.
Amparos administrativos
Sobre el espinoso tema de los amparos administrativos en donde algunas concesiones, según denuncias de gremios productores de carbón, fueron utilizadas para parcelar y vender al mejor postor, el funcionario anotó que se trata como toda la minería de un problema estructural.
“El problema data desde el inicio de la minería y como esta fue estructurada porque se generaron vacíos que finalmente los intermediarios y los especuladores terminaron aprovechando, apelando inclusive al desplazamiento. Muchos mineros campesinos fueron proscritos de sus predios en donde eran dueños del suelo, pero no del subsuelo abriéndole la puerta a incontables conflictos”.
La idea del Gobierno Nacional y de la Gobernación de Boyacá es ayudar a esos pequeños mineros que han sido tradicionales en esta actividad, pero dejando por fuera a muchas personas que abusan de la buena voluntad del ejecutivo y que disfrazándose de mineros tradicionales, entraron al negocio para pescar en río revuelto, acopiando en su favor títulos mineros para después especular con ellos.
Para este 2013 la idea es salir de los inconvenientes y por ello el despacho hizo un llamado a las asociaciones de mineros para que depuren sus bases de datos de agremiados y faciliten la tarea de los gobiernos nacional y departamental que esperan agilizar las legalizaciones y las formalizaciones.
Las ganas de trabajar con la minería tradicional son tan férreas que inclusive el proceso de asistencia técnica que impulsará la Gobernación con los mineros arrancará con una agenda que inicia en febrero en la emblemática e histórica población de Paipa. Para ese efecto serán contratados profesionales en minería que les lleven todo tipo de enseñanza a los mineros para que sus explotaciones sean mejor llevadas técnica y ambientalmente.
Sobre el tema de Cubará y sus reservas de gas que generó un diferendo entre Boyacá y Norte de Santander, el Secretario de Minas y Energía dijo que la idea es llegar a buenos acuerdo en donde las sinergias y la coherencia primen por encima de todo.
Planes de desarrollo para la comunidad
Este 2013 empieza con grandes retos para el departamento toda vez que se contemplan planes de electrificación rural que buscan mejorar la calidad de vida de los boyacenses más pobres y sacarlos de esa condición.
Para ese fin ya están programadas las citas con la EPSA y consolidar acuerdos que permitan iluminar los sueños de miles de personas que hoy siguen en la oscuridad por falta de redes eléctricas.
Según el Ingeniero Sánchez el 2012 fue un año intensivo en materia de planeación y por eso varios proyectos serán ejecutados en 2013 como los dos proyectos de gasificación en la parte norte y sur de la región del Sugamuxi.
El gran reto para las autoridades de Boyacá es trabajar de manera intensiva y comprometida en el tema de la seguridad en las minas de carbón por cuanto en 2012 hubo seis personas muertas, registro que no quieren repetir. Por tal razón se aumentan los trabajos en los puntos de salvamento y se amplían a tal punto que será puesto en servicio el de la Uvita que no solo será de auxilio sino de formación minera.