El Ministro de Defensa reveló nuevos detalles sobre el siniestro de la aeronave de la fuerza pública y pidió confianza en los resultados.
El ministro Luis Carlos Villegas se estrenó ante el Congreso de la República durante una sesión extraordinaria citada para dar respuesta a los numerosos cuestionamientos por el siniestro de una aeronave de la fuerza pública que dejó 16 policías muertos en Antioquia.
En el encuentro, el jefe de la cartera de Defensa insistió en que la hipótesis más probable es que Black Hawk cayó debido al mal tiempo, no por un impacto de algún artefacto explosivo externo, y trajo a colación datos nuevos consignados por la investigación que las autoridades adelantan.
Según el jefe de la cartera de Defensa el accidente se produjo por dos eventualidades: malas condiciones meteorológicas y congestión en las decisiones emitidas por las torres de comunicación y el piloto.
De acuerdo con el sistema Sky Track, utilizado por la Fuerza Aérea para registrar las medidas de cada aeronave, y con información difundida por el general Rodolfo Palomino, director de la Policía Nacional, cuando el helicóptero descendió a 110 pies y 60 nudos, una carga bélica que se transportaba en su interior se accionó produciendo daños en el rotor principal y haciendo que la cola perdiera la paleta y por consiguiente se produjo una falla en el motor.
Luego se dio un golpe en el rotor de cola que destruyó el alerón o estabilizador y que produjo que el helicóptero se estrellara. Villegas sentenció que “ha habido exceso de especulación” alrededor del caso, pues se ha dicho que grupos ilegales derribaron la aeronave sin que se adelantara una investigación definitiva. Añadió que el ministerio y las Fuerzas Militares adelantan un estudio juicioso del incidente, que las pruebas señalan que no hubo un ataque externo y pidió confianza en los resultados que este arroje.