La Defensoría del Pueblo denuncia el incremento de hechos violentos en el departamento de Arauca y la región del Catatumbo, en Norte de Santander. Los homicidios selectivos contra civiles alcanzan la cifra de 22 en el primer caso y 16 en el segundo, durante estos tres primeros meses.
La Institución registró entre enero y marzo, 22 homicidios selectivos de civiles en el departamento de Arauca, cifra a la que suma el deceso en enfrentamientos armados de nueve combatientes de la Fuerza Pública y los grupos armados ilegales, para un total de 31 muertes violentas frente a 16 del año pasado.
Frente a la comunidad afectada por estos hechos, 13 corresponden a hombres jóvenes con edades entre los 15 y los 30 años. El mayor número de víctimas (7) pertenecía a comunidades campesinas, cuatro eran comerciantes y seis más que aparecen como desempleadas, “habrían sido blanco de una aparente estrategia de “limpieza social”, que parece tomar fuerza en los municipios de Tame y Fortul”.
Aunque las investigaciones, de la Defensoría, alrededor de estos episodios no han llegado a una conclusión, las informaciones preliminares a las que ha tenido acceso la institución, señalan que el 68 por ciento de los homicidios (es decir 15 casos), habrían sido cometidos por el ELN, grupo que ha protagonizado recientes acciones de restricción a la movilidad mediante la instalación de retenes ilegales.
El organismo de control para los derechos critica estas acciones claramente violatorias del Derecho Internacional Humanitario. Asimismo, pide al ELN “coherencia entre su discurso de paz y el comportamiento de sus unidades en terreno, y espera que no obstante los 4 informes de riesgo y las 8 notas de seguimiento emitidas por el Sistema de Alertas Tempranas respecto a esta situación, las autoridades adopten medidas eficaces para contener estos alarmantes brotes de violencia y revertir la tendencia de las cifras que hoy muestran un deterioro de la seguridad en esas regiones”.