Dos ataques suicidas en una iglesia cristiana de la ciudad de Peshawar, al noroeste de Pakistán, dejaron 75 víctimas entre ellas mujeres y niños, afirmaron fuentes locales. La región del estrepitoso suceso ha sido punto de innumerables crímenes en los que han muerto más de 6.000 personas.
Cerca de 75 muertos y 100 heridos deja el atentado al convento cristiano perpetrado por un anónimo que no se ha atribuido lo ocurrido en la ciudad de Peshawar. Además de la alarmante cifra revelada por fuentes policiales, el médico responsable del principal hospital de la ciudad Sher Ali, añadió que “el balance se eleva a 43 muertos y más de 80 heridos”.
El jefe de la policía local Muhammed Noor, explicó que la misa recién iba a terminar cuando se produjo el atentado en el patio de la iglesia, sin embargo nadie se ha atribuido el suceso.
Al noroeste de Pakistán, la comunidad cristiana es una minoría rodeada de grupos vinculados a los talibanes. Con apenas el dos por ciento de una población de 180 millones de habitantes, en su mayoría musulmanes, miembros del cristianismo han afirmado en numerables ocasiones que han sido víctimas de leyes contra la blasfemia religiosa, criticadas a nivel mundial.
Asimismo, en la región también operan colectivos islamistas radicales entre ellos el Movimiento de los Talibanes de Pakistán (TTP), responsables de varios atentados que han causado la muerte de 6.000 personas desde el 2007.
“Estamos en una zona que es objetivo potencial para los terroristas; se habían tomado medidas especiales para proteger esta iglesia. Nos encontramos aún en la fase de socorros, pero cuando se termine investigaremos para saber qué fue lo que falló”, señaló el responsable de la administración de la ciudad, Sahibzada Anees.
