Tras la negativa del ex alcalde de Medellín, Alonso Salazar, de aceptar la presidencia, el Partido Verde entró en su etapa más crítica y denota una grave división al interior de sus miembros.
Alonso Salazar le dijo NO al Partido Verde para asumir su liderazgo, y su decisión generó un sisma al interior de esa colectividad, agravando la crisis que actualmente la aqueja y que no augura un buen futuro de cara a las elecciones de 2014 donde corren el riesgo de desaparecer si no alcanzan el umbral exigido para los partidos y movimientos pequeños.
El asunto del ex alcalde de Medellín sacó a relucir la profunda división que existe de tiempo atrás entre sus miembros más reconocidos y aún la Dirección Nacional del Partido no sabe qué hacer para retomar el rumbo de la llamada ‘ola verde’.
En un pronunciamiento público, ocho de sus miembros lamentaron la noticia de Salazar, pero al mismo tiempo la respaldaron y coincidieron en que hubo resistencia a los cambios sugeridos y prácticamente hicieron oficial su traslado a la disidencia dentro del Partido Verde.
“Nos resistimos a aceptar que la construcción de una fuerza política renovadora, independiente y democrática fracase por cuenta de triquiñuelas y pequeñeces. El Partido pierde una valiosa oportunidad para recomponer su gobernabilidad interna, recuperar su vigor como fuerza independiente y su capacidad de convocatoria, a otras fuerzas y liderazgos afines al cambio democrático”, indica el pronunciamiento.
Los firmantes son la Representante a la Cámara, Ángela María Robledo, el copresidente y Senador John Sudarsky, Jorge Eduardo Londoño, , Carlos Andrés Amaya, el Concejal Antonio Sanguino, Eduardo Andrés Garzón, y Sara Moreno Bolívar, Fabio Medrano, Delegados de Jóvenes de la Dirección Nacional, expresaron su preocupación por el actual proceso que lleva la colectividad.
“Habíamos trabajado pacientemente en la construcción de un acuerdo interno que implicaba cambios sustanciales en la vida del partido. Dicho acuerdo debía ser refrendado y adoptado por la Dirección Nacional. Desafortunadamente hubo resistencias a estos cambios en una parte de la dirección y dos de los compromisarios de estos acuerdos no los respaldaron íntegramente. Aunque las decisiones adoptadas constituyen un paso importante en la dirección deseada, tiene razón Alonso Salazar cuando resintió el cumplimiento pleno de la palabra empeñada”, señala el comunicado conjunto.
A su vez, coinciden con Alonso Salazar en el malestar sobre la actitud del Secretario General del Partido, Nestor Daniel García.
“La actitud de Néstor Daniel García actual Secretario General evidenciada por la carta que ha sido publicada por algunos medios de comunicación, revelan su deslealtad con Directivos del partido, además esta carta es mentirosa y calumniosa. Este hecho ni ninguno semejante puede volver a repetirse por alguien que represente la institucionalidad de nuestra colectividad”, puntualiza la misiva.
Por ello el grupo de los ocho convocó de manera urgente una cumbre del Partido con miras a tomar decisiones claras y certeras.
“Nos convocamos e invitamos a una Cumbre Verde que reúna a los principales líderes de todos los sectores inconformes del Partido el próximo jueves 1 de Agosto en la ciudad de Bogotá, cumbre en la que acordáremos la ruta a seguir para hacer posible la fuerza política que soñamos, insistiendo en la necesidad de re-encontrarnos en nuestro Partido Verde”, indicaron los firmantes.
García se defiende
Una de las razones por las que Alonso Salazar rechazó el cargo tiene que ver con Néstor Daniel García, Secretario General de la colectividad, quien le escribió un correo electrónico meses atrás, contándole qué ocurría con el Partido.
Salazar reenvió a los miembros de la Dirección Nacional, el correo que García le había escrito y dijo que el Secretario estaba “acusando a varios de los dirigentes del partido de componendas y tratos inadecuados (…) Un secretario general que haga tal cosa -actuar de manera desleal, antiética y calumniosa- no me despierta la más mínima confianza”.
Sobre el episodio, García en diálogo con Confidencial Colombia sostuvo que el correo al que se refiere el ex alcalde de Medellín no es nuevo, sin embargo reconoció que se equivocó en ese momento.
“Es una carta de la que no me siento muy orgulloso. Si tuviera la oportunidad de devolver el tiempo, no se la mandaría. La envié en un contexto que era muy diferente al de hoy y en un momento difícil para mí porque fue cuando decían que mi cercanía con el Alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, estaba detrás de la mermelada distrital, cosa que me ofendía demasiado”, explicó García.
El Secretario, que hizo parte del acercamiento entre Verdes y Progresistas, aseguró que solamente ha visto a Salazar una vez y que por ello no entiende por qué le hace esa “calificación personal durísima”, razón por la cual no entrará en confrontaciones con el político antioqueño.
“No le voy a responder, ¿cómo responde uno a esas calificaciones de una persona que no lo conoce? Cada día trae lecciones y la lección mía es que debo ser muy prudente, pero no puedo aceptar que me califiquen de desleal o antiético porque así no es. Es claro que un Partido no es un club de amigos, pero tenemos toda una vida por delante. Que se dé la oportunidad de conocerme como persona”, señaló.
A Néstor, la publicación del correo electrónico, lo cogió en Medellín y por sorpresa. A su regreso, espera reunirse con el Partido aunque asegura haber tenido conversaciones vía celular con Alfonso Prada, Carlos Ramón Gonzales, y Jorge Londoño “con el fin de ver cómo evoluciona la situación. Espero que encontremos un escenario de tranquilidad en torno a ese texto que nunca debió haber salido de la comunicación interna”, afirmó.
Finalmente Nestor Daniel García dijo que se siente tranquilo y que va asumir las consecuencias de lo ocurrido, que no se va “a escurrir, pero tampoco dejar arrodillar por quienes pretenden calificarme como un mal ser humano o indeseable. Por mi parte no se harán más invitaciones porque se ha tornado peligroso. Corre uno el riesgo de que a pesar de cumplir todos los compromisos, le den un totazo”.