El exgerente del Fondo de Vigilancia y seguridad fue imputado por irregularidades en contratos para la construcción de una sede de la Policía Metropolitana de Bogotá este miércoles.
Mauricio Fernando Solano fue señalado por la Fiscalía por los delitos de contrato sin cumplimiento de requisitos legales, prevaricato por omisión y peculado por apropiación en favor de terceros.
En esta ocasión el ente investigador logró asociar 8 procesos del Fondo de Vigilancia y Seguridad, donde figura Solano quien fue gerente de la entidad entre 2009 y 2012.
De acuerdo con el proceso, el contrato 730 para la construcción de la sede de la Policía Metropolitana de Bogotá fue adjudicado a finales de 2010, a la firma Castell Camel S.A.S., con un plazo de 15 meses y presupuesto de $43.794.257.360.
Luego de la adjudicación, la obra se suspendió 4 años después tras inconvenientes de calidad que le faltaban, causando un detrimento al patrimonio cercano a $28.000 millones. El acusado no aceptó los cargos que la Fiscalía le endilgó y la imputación tuvo que ser realizada en su casa ya que por el estado de salud de Solano no pudo ser trasladado a Paloquemao. La obra todavía lleva más de 15 meses paralizada.
