Un gran incendio consume hoy el histórico zoco de la ciudad de Alepo, en medio de los bombardeos y enfrentamientos entre los rebeldes y las fuerzas del régimen, informaron representantes de los insurgentes y grupos opositores.
“Las llamas estallaron por tiros disparados por francotiradores del régimen contra las tiendas del mercado, ya que es una construcción antigua con puertas de madera, y eso facilitó la expansión del fuego a todo el lugar”, dijo a Efe el portavoz de la brigada rebelde Al Tauhid, Bashir al Hayi, que combate en Alepo.
“Intentamos sofocar las llamas pero fuimos atacados con nutridas ráfagas de disparos, por lo que no hemos podido hacer nada. Ese mercado, además colinda con la Ciudadela y con las puertas de Bab al Nasr y Bab Antakia, que son importantes lugares arqueológicos de Alepo”, lamentó el jefe insurgente.
Al ser preguntado sobre por qué las fuerzas de Damasco han atacado un lugar histórico, Al Hayi respondió que el régimen “ha perdido el equilibrio en su lucha en Alepo, por ello disparan indiscriminadamente contra todo lo que consideran enemigo, y así han asesinado a civiles y destruyen edificios históricos”.
Respecto a los combates en Alepo y sus alrededores, el jefe rebelde dijo que los combatientes atacaron y se apoderaron hoy de un puesto del Ejército en la ruta que une la ciudad con la zona Al Bab.
“En esa operación varios soldados del presidente sirio, Bachar el Asad, resultaron muertos y heridos, y el resto huyó”, destacó.
Asimismo, reveló que los enfrentamientos más encarnizados se libran ahora en el casco antiguo de Alepo y en la zona de Aarqub.
“Hemos recuperado una gran parte de Aarqub y todavía prosigue el proceso. Asimismo, libramos duros combates en los alrededores de la Ciudadela y se han extendido hasta Bab Antakia, mientras prosigue la lucha en Bab al Nasr, y ya no acercamos a los barrios del Nuevo Alepo”, concluyó Al Hayi
Por su parte, la agencia estatal de noticias siria, Sana, informó de que las tropas mataron e hirieron a decenas de grupos terroristas en la ciudad y en la provincia de Alepo.
“En el marco de su misión patriótica de limpiar Alepo, nuestras fuerzas armadas destruyeron escondites y cuarteles de los terroristas y abatieron e hirieron a decenas de ellos, además de destruir camionetas dotadas con ametralladoras Doshka”, señalaron las autoridades gubernamentales.
Asimismo, la agencia precisó que las operaciones se llevaron a cabo en el barrio Al Kalasa y las áreas de Bab el Nireb, Bustan al Qasr, ubicadas en la ciudad de Alepo, mientras que redadas similares se efectuaron en las zonas rurales de la provincia.
Sana reveló también que las tropas sirias abortaron la noche del viernes intentos de entrada de grupos terroristas desde Líbano a través de la zona de Tel Kalaj, provincia de Homs.
Mientras, los opositores Comités de Coordinación Local (CCL) informaron en comunicados de que hasta ahora al menos 73 personas han muerto en los bombardeos aéreos y con artillería, además de en enfrentamientos entre las fueras leales al Gobierno sirio y los insurgentes en diversas zonas de Siria.
La mayoría de las víctimas mortales se produjo en las provincias de Damasco y su vecina Rif Damasco, un total de 47, entre ellas ocho civiles que fueron degollados con cuchillos por tropas y milicias progubernamentales en la localidad de Qudsia, precisaron los CCL.
Asimismo, el grupo de activistas denunció que en las áreas de Tel el Mastaba y Maaraba, también ubicadas en Rif Damasco, fueron ejecutadas sumariamente quince y cinco personas, respectivamente.
Esas tres masacres fueron confirmadas también por la agrupación opositora Comisión General de la Revolución Siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, por su parte, explicó en una nota que al menos 18 efectivos del régimen sirio han sido abatidos en ataques y enfrentamientos con los insurgentes en las provincias de Alepo, Deir el Zur, Rif Damasco y Deraa.
El conflicto que se vive en Siria desde marzo de 2011 ha causado ya unos 25.000 muertos, mientras que 2,5 millones de personas necesitan ayuda humanitaria y más de 250.000 se han refugiado en los países vecinos, según Naciones Unidas.