Dos goles de Wayne Rooney y Frank Lampard sirvieron hoy a Inglaterra para imponerse por 2-1 en un amistoso en Wembley ante una selección de Brasil liderada por Neymar y Ronaldinho.
El delantero del Fluminese Frederico Chaves “Fred” marcó el 1-1 al inicio del segundo tiempo aprovechando un error de la defensa local, pero los brasileños acabaron sucumbiendo ante los ingleses y lamentando el penalti que Ronaldinho desaprovechó al inicio del primer tiempo.
El encuentro era esta noche una nueva ocasión para celebrar el 150 aniversario de la Federación de fútbol inglesa (FA), una oportunidad que ni el seleccionador inglés, Roy Hodgson, ni el brasileño, Luiz Felipe Scolari, se tomaron como una cita menor.
Inglaterra lanzó desde el inicio su caballería sobre el área de los brasileños, con el delantero del Manchester United Wayne Rooney como referencia en el ataque, acompañado por su compañero en los “diablos rojos” Danny Welbeck y con el apoyo desde la retaguardia del “gunner” Theo Walcott, en estado de gracia esta temporada.
En la defensa, Hodgson incluyó una vez más a Ashley Cole, que se convertía así en el séptimo inglés que acumula un centenar de encuentros con la selección nacional.
Scolari tampoco reservó a sus estrellas y apuntó en su once a Neymar, que conserva un mal recuerdo de Wembley, donde ya perdió este verano ante México la final de los Juegos Olímpicos, y a Ronaldinho, que volvía a vestir la camiseta amarilla de la “Canarinha” a sus 32 años después brillar la última temporada en el Atlético Mineiro.
Fue precisamente el exdelantero del FC Barcelona, que en 2002 formó parte del Brasil que eliminó a Inglaterra del Mundial de Japón y Corea en cuartos en su camino hacia el título (2-1), quien tuvo en sus botas la primera ocasión clara para desequilibrar el duelo.
El árbitro portugués Pedro Proença apreció mano dentro del área del centrocampista del Arsenal Jack Wilshere en el minuto 17 y Ronaldinho no dudó en agarrar el balón y plantarlo en los once metros.
El delantero retrocedió unos pocos pasos y eligió el lado derecho para lanzar un disparo cuya trayectoria adivinó el guardameta Joe Hart, que detuvo el penalti y evitó después que Ronaldinho tuviera éxito al rematar el rechace.
En un encuentro rápido, de ida y vuelta, en el que ambos equipos se estiraban sobre el césped de Wembley para alcanzar la portería rival, sólo pasaron ocho minutos hasta que Inglaterra fabricó una ocasión inapelable.
Fue Walcott, el centrocampista que exigió al Arsenal convertirse en delantero y que lleva ya 18 tantos esta temporada, quien llegó en carrera al área de Júlio César y remató un balón que el arquero brasileño despejó con problemas.
Rooney estaba, sin embargo, al acecho, y se hizo con el rebote para envenenar un disparo que se coló entre los defensas para establecer el primer gol de Inglaterra.
La ventaja hizo creer a los locales que tenían dominada definitivamente a la selección brasileña, pero ese exceso de confianza propició el empate al inicio del segundo tiempo.
El defensa del Chelsea Gary Cahill trataba de sacar un balón controlado de las cercanías de su área, pero Neymar se adelantó para interceptar el cuero, que quedó en las botas de “Fred” para que éste diera un zurdazo desde el borde del área que equilibraba el duelo en Londres.
Inglaterra no se quedó atrás, sin embargo, y aprovechó un tropiezo en defensa del jugador del Santos Marcos Arouca para recuperar un balón en el área de Brasil y marcar su segundo y definitivo tanto por medio de Frank Lampard, que sustituía a Cleverley tras el descanso.
– Ficha técnica:
2 – Inglaterra: Joe Hart, Ashley Cole (Baines, m.46), Smalling, Johnson, Cahill, Cleverley (Lampard m.46), Gerrard, Wilshere, Rooney, Walcott (Lennon, m.75), Welbeck (Milner, m.61).
1 – Brasil: Júlio César, Dani Alves, David Luiz (Miranda, m.78), Dante, Adriano (Filipe, m.69), Ronaldinho (Lucas, m.46), Ramires (Arouca, m.46), Paulinho (Jean, m.62), Luis Fabiano (Fred, m.46), Oscar, Neymar.
Goles: 1-0, m.27: Rooney. 1-1, m.48: Fred. 2-1, m.60: Lampard.
Árbitro: Pedro Proença (Portugal).
Incidencias: Internacional amistoso disputado en el estadio londinense de Wembley ante 87.453 espectadores.