Mientras usted lee esta noticia, más de 30.000 combatientes están luchando para recuperar Mosul del poder del autodenominado Estado Islámico. Tras dos años y 131 días bajo el yugo islamista, fuerzas iraquíes, tropas del kurdistán iraquí, milicias chiíes, combatientes suníes y la coalición internacional que lidera Estados Unidos, se preparan para recuperar la ciudad, considerada la capital de facto del DAESH en Irak.
La operación militar para reconquistar Mosul, en poder del ISIS desde junio del 2014, lleva meses planeada. Antes del comienzo de la operación se lanzaron sobre la ciudad miles de panfletos advirtiendo a los ciudadanos que el comienzo de la ofensiva armada de tropas del ejército iraquí, con la ayuda de fuerzas aliadas, era inminente. En el punto de mira está la sociedad civil, se espera que los combates provoquen el éxodo de medio millón de personas.
En el despliegue militar, que podría durar semanas o meses, están implicados unas 30.000 militares iraquíes apoyados por fuerzas aéreas de EEUU, según informa The New York Times. En el otro lado, habría alrededor de 5.000 milicianos, dispuestos a dar la vida por esta ciudad. Repasamos las claves de la importancia de la batalla de Mosul.
La importancia económica, estratégica y cultural de Mosul
Mosul se encuentra a unos 360 km de distancia de la capital iraquí, Bagdad, en la provincia de Nínive, bañada por el río Tigris. Se trata de una región que cuenta con amplias reservas naturales como petróleo y además está cerca la presa de Mosul cuyo papel es fundamental para abastecer agua a la región. Desde el punto de vista geográfico, es un ciudad que conecta Irak con Siria por lo que su liberación supondrá un duro golpe a la consolidación del Califato. Mosul es también el hogar de varias tribus y etnias como kurdos, árabes, turcomanos, cristianos y judíos han convivido durante muchos años en paz. Por eso, su liberación influirá mucho el futuro político de Irak.
¿Por qué es clave Mosul?
La toma de la ciudad de Mosul por parte de los yihadistas fue un duro golpe moral para el ejército iraquí ya que se cuestionó su profesionalidad. Para los yihadistas fue una victoria colosal que permitió conectar el califato entre Siria e Irak y enviar combatientes desde Siria e Irak. Una derrota de Estado Islámico en Mosul interrumpirá esta ruta al tiempo que limitará la operaciones militares de los yihadistas a la vecina Siria.
Preocupación humanitaria
Se espera que sea una batalla sangrienta en la que la población civil será la principal víctima. En la ciudad siguen atrapadas alrededor de 1,2 millones de personas. Los yihadistas han advertido a la población sobre las consecuencias de cruzar a la vecina siria. Los iraquíes que permanecen en la ciudad están enfermando porque el agua está contaminada, no hay comida, los precios son deshorbitados y ya no queda nada en el interior de la ciudad.