Kotex y pañales, un mercado en el que manda Kimberly-Clark

La multinacional Kimberly- Clark de Estados Unidos aseguró que seguirá con su apuesta en el mercado de América Latina aún en medio de la contracción de los mercados internacionales y de la expectativa que genera la economía americana.

El gerente general de Kimberly-Clark para Colombia, Federico Restrepo declaró en Confidencial Colombia que la firma ve muchas oportunidades en Latinoamérica por ser esta una región con un gran potencial. Anotó que no son pocos los europeos que quieren llegar a este sector del mundo a invertir por cuanto ven oportunidad de renta y buenos negocios.

“Estamos muy optimistas porque para la corporación hace unos pocos años todo lo que fueran regiones independientes de Estados Unidos, representaban el 30 ó el 35 por ciento de los ingresos, a hoy esos ingresos suman más del 50 por ciento y claramente la oportunidad en los próximos cinco años serán todos estos países emergentes y regiones en desarrollo”, precisó.

Sobre la coyuntura internacional aclaró que en Estados Unidos se experimenta una recuperación económica a paso lento y en Europa, apuntó, todavía no se vislumbra la salida a la crisis. “Eso hará que capitalicemos nuestra operación en la región y puntualmente en Colombia”.

Sobre la incertidumbre que suscita el techo de la deuda en Estados Unidos afirmó que indudablemente la situación tiene pensando a las empresas porque uno de los retos estructurales que tiene el país del norte es precisamente el empleo y si no hay esa confianza inversionista, obviamente no habrá nuevos proyectos y por consiguiente no habrá empleo ni consumo que finalmente es la base de la economía americana.

“Lo cierto es que debe haber un esfuerzo público-privado para generar las condiciones estructurales que permitan que vuelva la confianza tanto en la inversión como en el consumo y revitalizar así la economía americana”, afirmó el señor Restrepo.

Para el alto ejecutivo si no mejora la dinámica en el consumo americano, vendrán problemas para los socios y países productores de valor agregado y commodities como es el caso de Colombia.

Sobre la reforma tributaria anotó que esta es conveniente para los empresarios por la baja en las tarifas de impuesto de renta y eliminación de parafiscales, pero consideró que como multinacional y como empresa que cree e invierte en el país, antes que mejoras tributarias, lo más importante es la estabilidad jurídica. Dijo que para el caso de la zona franca de la empresa y otros factores, es muy clave que se garanticen condiciones ya brindadas a los inversionistas.

Sobre la reforma al estatuto tributario como tal manifestó que lo único que se espera es que esta ayude a las factorías con líos de rentabilidad por la revaluación y por la misma competencia.


La otra Colombia

En opinión del gerente general de Kimberly-Clark, Federico Restrepo, la imagen de Colombia es muy diferente a la de hace algunos años, pues el empresario exógeno ve al país como un destino de inversión en donde no hay mucho que pueda preocupar.

“Nosotros por fortuna siempre hemos visto a Colombia como una gran plaza toda vez que iniciamos operaciones hace 45 años y experimentamos las difíciles y las más difíciles, pero siempre creímos en Colombia, inclusive en momentos en que se puso en duda la institucionalidad del país y su imagen no era la mejor. Lo importante fue que le apostamos a la capacidad colombiana de transformarse y salir adelante, asunto que no nos defraudó”, aseveró Restrepo.

Añadió que uno de los valores agregados de Colombia es el talento, factor que sirvió para superar tantos escollos y para mostrarle al mundo de lo que se es capaz en medio de las oportunidades y las mismas vicisitudes.

Kimberly Clark tiene dentro de su plan de inversiones el Centro Global de Innovación que demandó recursos por valor de 25 millones de dólares. De igual forma entran en el plan de inversión las nuevas tecnologías para desarrollar productos bandera como Kotex y pañales Huggies.

El gerente de Kimberly presentó los nuevos desarrollos en productos esenciales como las toallas higiénicas de Kotex y pañales Huggies, los cuales se caracterizan por tener mayor absorción con su tecnología 3D o de tres capas, lo que permite un producto más confiable que brinda la mayor comodidad y sensación de aseo.

Las ventas promedio al año de pañales Huggies asciende a 580.000 millones de pesos y las de toallas higiénicas suman aproximadamente 432.000 millones de pesos. Cabe anotar que el 50 por ciento de la producción de Kimberly en Colombia es oferta exportable. Esta multinacional lleva sus productos a más de 30 países y hace presencia de marca en cinco continentes.

La empresa desde ya trabaja en nuevas técnicas que la lleven a altos estándares de calidad y cumplimiento con el medio ambiente por lo que no descartó que en breve lleguen muy buenas noticias en producción ecológica y amiga de la sostenibilidad.


Los más pobres usan menos pañales

Estudios adelantados por la firma revelan que en materia de hábitos y usos diarios, el estrato uno es el que menos pañales usa con 3.52 unidades, le sigue el estrato dos con 3.78 pañales y el estrato tres con 3.87 unidades. Los que mayores consumos presentan son los estratos cuatro, cinco y seis con un promedio de 4.36 pañales al día.

En materia de precios, mensualmente el 32 por ciento de los hogares gasta entre 50.001 y 60.400 pesos, lo que dice que es el consumo promedio más alto. En un año esta cifra llega a valores de 234.000 y 960.000 pesos. Le sigue el rango de precios entre 19.001 y 35.001 con el 21 por ciento. Los valores superiores se ubican en un ocho por ciento.

Llama la atención que aún compite en menor proporción el pañal de tela, el cual representa un cinco por ciento del mercado. En Colombia el 95 por ciento del consumo nacional de pañales es de la oferta de desechables, pero todavía hay un grupo de colombianos que prefiere el pañal de apuntar con gancho o de amarrar con tela. La cifra no debe sorprender por cuanto en Perú el mercado de pañales de tela llega al 20 por ciento.


Cifras de protección femenina

En Colombia el 81 por ciento de los hogares tiene productos de protección femenina. De este margen ocupan el primer lugar las toallas higiénicas, seguidas de protectores y tampones. Según estudios de hábitos y consumo, el 59 por ciento de las niñas empieza a usar productos de esta categoría a la edad de 12 ó 13 años por recomendación materna o por publicidad.