Las organizaciones ‘Colombia Quiere’, ‘Somos capaces’, con apoyo del Centro Democrático y bajo el lema ‘paz sin impunidad’, convocaron este 13 de diciembre marchas en las principales ciudades del país, en contra del actual Gobierno colombiano.
Las manifestaciones en la que participaron estudiantes, colectividades, y representantes políticos entre otros, tuvo como común denominador las exigencias de los asistentes en torno al proceso de paz, el cual aseguran se debe dar sin entrega de gobernabilidad. Asimismo, algunos de los ciudadanos expresaron su ‘temor’ a que Colombia se “convierta en otra Venezuela”.
En Bogotá, unas 6.000 personas, según los organizadores, se reunieron el Parque Nacional y desde allí caminaron hasta la emblemática Plaza de Bolívar. “Colombia quiere paz sin impunidad” era el lema con el que el grupo de ciudadanos manifestó su inconformismo no solamente frente al desarrollo y los términos en que se están manejando los diálogos de paz en La Habana, sino en contra del actual Gobierno.
“Estamos exigiendo que no hayan tantas negociaciones con las Farc, ¡no queremos más Farc!”, dijo el manifestante Carlos Rios, quien explicó también, que “el señor Presidente trata de hacer bien las cosas, pero se le va la mano”.
No obstante, algunos de sus compañeros no compartieron su posición y decidieron ser más críticos con el actual Gobierno. Por ejemplo, para Margarita Restrepo, autodenominada líder del Casanare, el jefe de estado Juan Manuel Santos, “se robó la presidencia”, y “quiere acabar con nuestro ejército y con la policía”. Razón por la cual, ella, quien “no quiere ver nunca a un colombiano arrodillado” y desea además “que Colombia sea un país digno” apoyó la marcha para que su pueblo no termine como Venezuela: “¿Venezuela en qué situación está? ¡Muy pobre! Nos quieren poner al punto de qué ni papel higiénico vamos a tener, donde tenemos que arrodillarnos para poder comprar un carro… eso es lo que él (Santos) está buscando y eso es lo que los colombianos no podemos permitir”, explicó.
Este ‘temor’ es compartido por otros marchantes, como el caso de Francisco Jiménez* quien afirmó que las “malas decisiones” que ha tomado el mandatario, son ‘consejos’ que ha recibido de sus homónimos; “eso es de hablar con Maduro; los consejos que le están dando los Castro en Cuba”, comentó, al tiempo que señaló la crisis que a su modo de ver está atravesando América Latina “lo que está haciendo Correa en Ecuador; lo que está haciendo Evo Morales en Bolivia; lo que está haciendo ese otro pícaro en Nicaragua, pero el pueblo de Nicaragua está sufriendo, así como los otros pueblos”.
Finalmente Jiménez* declaró su apoyo al actual senador de Centro Democrático Álvaro Uribe Vélez: “le dicen guerrerista y la guerra de Uribe nos trajo paz. En cambio la paz de Santos nos está trayendo más guerra, porque Santos es un delincuente y se lo sostengo, así me vaya a poner un denuncio y me vaya a meter a la cárcel, así como están poniendo en la cárcel todos los opositores en Venezuela”, sentenció.
Por otra parte, durante la Jornada en Bogotá, a la que el General Bedoya se refirió como: “lo que sucedió es que hubo millones de colombianos que estaban representando a millones, en medio de la lluvia, en medio del mal tiempo, en medio de la carrera séptima tapada, en medio de que no pudimos usar las escaleras… y la gente está feliz, no se quiere ir, ese es el resultado de la marcha”, también se presentaron agresiones verbales contra algunos medios de comunicación.
Para el marchante Carlos Ríos, el problema radica en que “la prensa llega demasiado tarde. Cuando el pueblo necesita la información la empresa como es las telecomunicaciones y como es un monopolio, no mira el bienestar del pueblo”.
Mientras que para Julián Giraldo, uno de los manifestantes más ofuscados con la prensa, el dilema es que “la mayoría de los periodistas son unos vendidos, unos arrodillados, porque como Santos se roba la plata del Estado, a los periodistas le dice: “tenga usted, tenga usted, y hagan lo que yo quiera”. Pero esa plata no es ni de Santos, -si fuera plata de él, pues que haga lo que quiera con ella-, pero esa plata es de nosotros los colombianos”.
De la misma manera aseguró que el mandatario colombiano no solamente tiene monopolizados los medios de comunicación sino que: “compra conciencias, compra los congresistas, compra hasta el diablo, con la plata de nosotros los colombianos ¿usted cree que eso es justo? No podemos esperar que conviertan a Colombia en otra Venezuela”, repitió Giraldo.
Con excepción de estos incidentes de agresiones verbales, la marcha en la capital no presentó más alteraciones del orden público y según algunos de los presentes, la idea es replicarla en otras oportunidades, con el fin que sus exigencias sean escuchadas.
*Nombre cambiado