Las autoridades de Afganistán confirmaron que al menos 36 combatientes del grupo terrorista Estado Islámico murieron como resultado del lanzamiento de la ‘madre de las bombas’ de EE.UU. sobre el territorio afgano en las últimas horas.
De acuerdo con la Agencia EFE, el bombardeo con la GBU-43, un proyectil de 10 toneladas que mata con una onda de presión aérea, fue ejecutado ayer a las 19.32 hora local (15.02 GMT), en el distrito de Achin, en la provincia oriental de Nangarhar, con la aprobación del presidente estadounidense, Donald Trump.
En un comunicado enviado a EFE, un portavoz del Ministerio de Defensa afgano, Dawlat Waziri, señaló que, “un importante refugio y tres escondites de ISIS han sido destruidos como consecuencia del impacto de la denominada “madre de todas las bombas”.