El cantautor español Alejandro Sanz, quien llegó a Bogotá para presentar su álbum “La Música no se toca” como parte de su gira latinoamericana, ha reconocido que hoy en día tanto las canciones como los artistas no tienen la misma trascendencia de antes.
“Pensar en posicionar una canción y que se convierta en un clásico, es muy difícil por la forma tan rápida en que se consume la música hoy en día”, aseguró Sanz en rueda de prensa.
“Antes cuando alguien compraba un disco, cuidaba las canciones y las escuchaba durante meses, pero hoy en día se consume la música mucho más rápido, y eso pasa también con los artistas, no tienen la misma trascendencia que tenían los de los años 60 o 70, por la forma tan rápida en la que viaja la información”, aseguró Sanz.
El cantante español explicó además el porqué del nombre de su álbum “La música no se toca”, es una forma de proteger la música. Y agregó que “es una especie de declaración de principios, lo que significa para mí la música, creo que hay muchas cosas que cambian y a mucha velocidad y hay que adaptarse a casi todo, pero hay cosas que no son negociables, y una de ellas es la música en sí”, dijo.
“Se cambia la forma en la que se consume la música pero creo que es muy importante que siempre tengamos en cuenta cuidar la calidad de la música, no solo la cantidad”, afirmó.
Sanz confirmó que este álbum en el que destacan canciones como “No me compares”, “Se vende” y Mi marciana”, ha contado con la producción del colombiano Julio Reyes Copello.
“Fue muy fácil trabajar con él, es un hombre con mucha paciencia, con mucho talento y además muy orgulloso de sus raíces. En todas las canciones siempre hizo sonar su arpa llanera, o un instrumento que recordara su tierra. Así que fue un regalo haberle conocido, y es un orgullo haber podido trabajar con él”, aseguró.
Sanz, que se presentará este martes en el coliseo El Campín de Bogotá, señaló que le gustaría compartir escenario con el colombiano Carlos Vives porque “tiene buena vibra y es conocedor de la música, sería muy interesante”.
Con su nuevo trabajo discográfico, Alejando Sanz recibió doble disco de platino en Colombia, tras su presentación en enero pasado en Manizales (centro), además de conseguir quíntuple disco de platino en su natal España y doble disco de platino en México, Venezuela y Argentina.
De igual manera recibió disco de oro en Chile, Ecuador, Uruguay y Perú.
“Los premios son un reconocimiento a lo que se ha hecho, pero uno no hace los discos pensando en ningún premio en concreto”, dijo aunque recalcó que “quizá los discos de oro y platino son lo más cercano a la felicidad completa después de un trabajo, por lo que significa, y es muy bonito recibirlos”, añadió.
Con EFE
