“Francia, y Europa, creen en una Colombia en paz porque sabemos que es lo mejor que le puede pasar a este magnífico país y a su pueblo”, aseguró Jean-Marc Laforêt, embajador francés en este país.
“Los colombianos hoy tienen la oportunidad de aportar al resto del mundo una buena noticia”, dijo emotivamente durante la celebración del Día Nacional de Francia en la casa de la embajada francesa en Bogotá.
Laforêt destacó que los avances del proceso de paz son considerables. “El acuerdo que acaba de ser convenido este 12 de julio es una nueva señal de la voluntad compartida de acabar con la guerra”, enfatizó.
Y dijo que “este acuerdo introduce una nueva dinámica positiva a las negociaciones. E insistió que la paz está al alcance de la mano”.
Justa y sostenible
De acuerdo con el jefe de la delegación diplomática francesa en Colombia, “es por esto que, deseamos que nuestras relaciones bilaterales sean pertinentes en la preparación de una paz estable, justa y sostenible”.
“Compartimos la idea de que tal paz necesita la presencia del Estado sobre todo el territorio y a través de la puesta en ejecución de políticas públicas fuertes”, subrayó.
“Transita también a través de la construcción de memoria y de la defensa de los derechos de las víctimas, derechos que el gobierno ha ubicado en el corazón del actual proceso de paz”, afirmó Laforêt.
“Es fundamental, y deseamos acompañar este proceso de nuestro lado mediante por ejemplo el Premio franco-alemán de los derechos humanos Antonio-Nariño que se realiza desde el 2010, y gracias a nuestra cooperación con el Centro Nacional de Memoria histórica”, sostuvo el diplomático.
“Cuando las armas se callan, la paz es un renacimiento y un nuevo comienzo, como puede ser la vida en cada una de sus grandes etapas”, concluyó.