El exministro Álvaro Leyva Durán, presentó al Gobierno y a las Farc su propuesta de paz para “destrabar” el proceso en La Habana. El documento devela seis puntos entre los que se destaca un cese al fuego para adelantar un desminado de todo el país a partir del próximo 18 de noviembre.
En el primer punto, el exministro exhorta a la Mesa en La Habana a “que prescinda de la intención de vincular el proceso de paz a las próximas contiendas electorales”. De la misma manera reafirma que continuar con ese proyecto unilateral “tensa, interfiere y pone en peligro la serenidad, estabilidad y transparencia” de la meta de la paz.
La siguiente propuesta de Leyva se centra en declarar un “amnisticio vigilado” o cese de hostilidades. Esta posibilidad se daría, según el exministro, momentos antes a la firma de un futuro acuerdo de paz, más precisamente el 18 de noviembre. Para la verificación de esta “amnistía”, propone a “personal no militar” liderado por el Secretario General del Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz.
Luego de este cese al fuego, la propuesta señala el inicio de un “estudio de estrategias y el establecimiento de logísticas para el desminado”. En este punto, Leyva pretende crear una comisión alterna de los negociadores, junto con representantes de la sociedad civil, para llevar a cabo esta tarea.
Por otra parte, en el tema de la solución al problema de las drogas ilícitas, plantea la participación internacional de los Estados Unidos, México, Perú, Bolivia y la Unión Europea para deliberar sobre la erradicación de las drogas ilícitas en Colombia.
En términos de justicia, el documento sugiere que los beneficios que les van a dar a las Farc luego de la firma de un acuerdo final, también le sean otorgados a los miembros de la Fuerzas Armadas.
Finalmente, el excandidato presidencial dejó claro que su proyecto de paz no tiene nada que ver con algún fin electoral.
