La reina del gol se retira y deja un récord inalcanzable para los hombres

La delantera ha anunciado su retirada. El próximo 16 de diciembre jugará su último partido con la selección de Estados Unidos, con la que ganó la pasada Copa del Mundo que se celebró en Canadá.

El exjugador Ali Daei tiene el récord de goles internacionales marcados en la historia del fútbol masculino. Entre 1993 y 2006 anotó 109 en 149 partidos con la selección de Irán, con la que jugó dos Mundiales (1998 y 2006).

Ese registro es muy superior a los que le siguen en la lista, como Puskas (84), Hussein Saeed (78), Pelé (77) o Chitalu (76), pero se queda muy lejos del récord absoluto: los 184 goles de la jugadora estadounidense Abby Wambach.

Wambach, de 35 años, anunció su retirada este martes después de la visita de las jugadoras de selección estadounidense a la Casa Blanca, donde fueron recibidas por Barack Obama como reconocimiento a la victoria en la Copa del Mundo del pasado verano.

El triunfo en el torneo celebrado en Canadá es la guinda perfecta a una carrera internacional que comenzó en el 2001. En estos catorce años ha ganado dos oros olímpicos (2014 y 2012), el Mundial de este año (el primero de Estados Unidos desde 1999) y el FIFA World Player en 2012.

“Después de pensarlo mucho y hablar con mis amigos, mi familia, mis compañeras y el cuerpo técnico, he decidido poner fin a mi carrera futbolística”, dijo Wambach en un comunicado. En 252 partidos con la selección estadounidense, Wambach ha marcado 184 goles, un resgistro que aún puede mejorar.

Tras el Mundial, la selección comenzó el ‘Victory Tour’, una gira de diez partidos por todo el país. para celebrar el título. Ya se han jugado seis y los cuatro restantes se disputarán en diciembre: dos contra Trinidad y Tobago y dos contra China. Será en el segundo partido contra las chinas, el 16 de diciembre en Nueva Orleans, cuando Wambach se despida.

Una cabeza de oro

La delantera ha sido la líder de la selección estadounidense durante la última década. Ha sido el enlace entre la generación anterior, que ganó el Mundial de 1999 liderada por Mia Hamm (la segunda en la lista de máximas goleadoras con 158 goles) y la generación actual.
Durante todo este tiempo, la superioridad de Wambach sobre las defensas rivales ha sido tan importante que el estilo de juego de la selección ha estado definido por ella, sobre todo por su capacidad para rematar de cabeza. Con ella en el campo, el balón era más peligroso volando hacia el área que por el suelo. De cabeza marcado 77 de sus 184 goles.

“Es una ecuación matemática. Soy alta. Puedo saltar. Y cuando rematas con la cabeza, es imposible que los porteros sepan a dónde va a ir el balón”, explicaba antes de la Copa del Mundo en una entrevista en ‘Sports Illustrated’.

De cabeza también llegaron los dos goles más importantes de su carrera. El primero fue en la final olímpica de 2004 contra Brasil, cuando marcó el definitivo 2-1 en el minuto 112. El segundo fue en los cuartos de final de la Copa del Mundo de Alemania 2011. Estados Unidos perdía, también ante Brasil, por 2-1 y Wambach empató en el minuto 122 y forzó la prórroga.

En el pasado Mundial no brilló e incluso llegó a perder su puesto de titular en un equipo que ha ido cambiando su estilo hacia un juego menos directo y más combinativo.

En Canadá marcó sólo un gol, su peor registro en los cuatro que ha jugado (se retirará con 14 goles en esa competición, sólo por detrás de la brasileña Marta), pero siguió siendo la líder del equipo, la capitana. Lo será también el próximo 16 de diciembre, cuando juegue su último partido. Será la despedida de la jugadora que más goles ha marcado en la historia del fútbol de selecciones.