La cantante estadounidense llega al festival de Jazz del Teatro Libre a presentar una voz encantadora, y un repertorio que privilegia las composiciones.
René lleva con orgullo su raza, no se define porque está llena de cambios, ha vivido 56 años a plenitud, no porque el destino lo quiso, sino por la porfía de ser la persona que quiso ser. René Marie es la cantante de Jazz que con su encantadora voz toca el corazón.
Las letras, que toman vida con la orquesta, tienen un lugar privilegiado en su repertorio por el vínculo sentimental que estas le representan, y porque mediante ellas, invita a conversar no con las palabras sino con el cuerpo que dice lo que el temor acalla.
En los conciertos se da la libertad de conmoverse con los rostros de los que acuden a oírla, porque allí, en ese oscuro lugar, se sumerge en la emoción que trasciende a la razón. Su música es el reflejo de lo que siente. En ellas, se percibe la celebración de su vida.
“Tengo 56 años, una mujer.Tengo dos hijos de 37 y 35. Empecé a cantar cuando tenía 42 años y es algo que verdaderamente amo hacer. No se como podría vivir si no pudiera cantar.”
En realidad empezó mucho antes. René Marie Stevens, en su adolescencia cantaba Rhythem and Blues para una banda de su barrio en la que conoció al padre de sus hijos y con quien se caso siendo joven. Con su nueva vida de casada, abandonó una prometedora carrera para llevar una vida familiar.
Se dedicó a ser mujer y esposa. Sin embargo, nunca abandonó el canto, actividad que rescató para sí misma y para sus hijos.
¡Nada pasa por coincidencia! Su hijo mayor, universitario en la época que Rene Marie inició su carrera, asistió alguna vez a un restaurante donde tocaba una banda de jazz y ante la presentación de estos singulares músicos, decidió llamar a su madre para decirle “Mamá tu tienes que venir y ver cantar a esta mujer. Ella canta los mismos temas que tu cantas en casa, y ¡ella es terrible!”
René Marie acudió a la petición de su hijo y vieron a la mujer cantando con un trio. Él le dijo: “Mamá, tú puedes hacerlo mejor que esto. ¡Debes hacerlo!, ¡tú puedes hacerlo Mamá!
Puso de presente su edad aludiendo que es muy tarde para empezar. Ante la insistencia de su hijo, y el valor de René Marie de creer en ella, lo intentó.
“No fue fácil” dice. Con dificultades familiares, luego de ir obteniendo logros profesionales producto de su voz, sobrepaso las barreras del dolor y del miedo para renacer, nombre de su primera producción discografía “Renaissance” (1999).
Desde entonces ha consolidado una carrea profesional que más que darle el reconocimiento mundial, le da la satisfacción de vivir a plenitud.
