Senadores, funcionarios y referentes del partido liberal se reunieron este miércoles con el presidente Santos para tocar varios temas de la agenda nacional. Hablaron de paz, agenda legislativa, la asamblea de la U, de Uribe y de reelección. La colectividad le manifestó su respaldo total a las iniciativas del mandatario y a su eventual interés de permanecer en el poder por 4 años más.
“Santos se ratificó como el líder natural del liberalismo”, afirmó uno de los asistentes a la reunión que sostuvieron varios referentes del histórico partido con el Presidente en la residencia del parlamentario Camilo Sánchez.
Antes de las ocho de la noche, varios de los invitados a la reunión comenzaron a llegar. Los alrededores de la vivienda, ubicada cerca a la avenida 19 con calle 116, se llenaron rápidamente de escoltas y de miembros de la fuerza pública.
Uno a uno, senadores del partido liberal hicieron su aparición y, minutos antes de las 8pm, llegó Santos. Acompañado de Rafael Pardo, Cristina Plazas, Fernando Carrillo y Juan Mesa, descendió de una camioneta y entró al apartamento del senador. Allí también estuvo Cesar Gaviria, expresidente de la República y uno de los referentes más relevantes de la colectividad.
También asistieron los senadores Juan Fernando Cristo, Simón Gaviria, Luis Fernando Velasco y el anfitrión, Camilo Sánchez.
Según varios de los asistentes, la del miércoles fue una “reunión tranquila, relajada. Una reunión entre amigos”. Hablaron de temas de la agenda nacional, de la agenda legislativa, de la necesidad de crear empleos, de los acercamientos de paz y, por supuesto, de la asamblea del partido de la U.
Los liberales fueron “muy especiales” con el Presidente, y no le hicieron ningún tipo de “reclamos burocrático”, según los asistentes al evento. Los liberales se encargaron de volver a recordarle su total respaldo a la iniciativa de paz y a la idea de poner fin al conflicto a través de una salida negociada.
Sin embargo, el Presidente les comentó que si bien es una prioridad de su administración, no es una “obsesión”. Santos les dijo que “no es rehén” de la negociación y que si no ve avances rápidos en la mesa de diálogo, no tendría ningún problema en retirarse.
A pesar de esta afirmación, los liberales y funcionarios del gobierno saben que si el Presidente emprendió este camino de dialogar con la guerrilla de las Farc es porque él confía plenamente en las probabilidades de sacar adelante el proceso. “Santos es un buen jugador en el escenario político”, afirmó uno de los invitados.
La reunión, que duró hasta casi las 11 de la noche, también tuvo momentos jocosos: todos los asistentes al evento vistieron corbata roja, y solo Simón Gaviria y Mauricio Cárdenas, ministro de hacienda, portaron corbata azul. Por supuesto, hubo chistes y burlas a Gaviria por el desatino en el color.
Una de las conclusiones de la reunión fue que el proceso de paz debe articularse con una política social del gobierno. La generación de empleo será, según los asistentes a la actividad, clave para encaminar al país a la superación del conflicto.
Los temas más álgidos de la conversación fueron sin duda la asamblea del partido de la U, la posición del expresidente Uribe frente al naciente proceso de paz y la reelección del mandatario.
“Santos y sus funcionarios manifestaron su molestia por el ‘saboteo’ que sufrieron el domingo en la asamblea de la U”, afirmó uno de los asistentes. Frente a este tema, el partido liberal le manifestó “el apoyo que no le dio la U” en los temas que está tratando de sacar adelante.
En la conversación también surgió el tema de la postura del expresidente Uribe frente al proceso de paz y el diálogo con las guerrillas. Y hubo acuerdo en opinar que el exmandatario “no cree en la negociación y se la está jugando para que este acercamiento con las Farc no salga bien”.
Los asistentes también hablaron de reelección. La intención del mandatario de seguir por otros cuatro años es cada vez más evidente y la colectividad mostró, como en el resto de los temas, el apoyo a Santos si decide lanzarse de nuevo a la presidencia.
Las casi cuatro horas de encuentro y reunión le dejaron claro a Santos que tiene un partido “a su disposición” y a los liberales que tienen un presidente que gobierna con sus ideas.