Una noche de profundos escotes en uve y espaldas al aire. Sin grandes riesgos y muchos aciertos, pero poco espectáculo. Más allá del cine y la televisión, así ha sido la alfombra roja con la que comienza la temporada de premios.
Una noche de profundos escotes en uve y espaldas al aire. Sin grandes riesgos y muchos aciertos, pero poco espectáculo. Más allá del cine y la televisión, así ha sido la alfombra roja con la que comienza la temporada de premios.