Éste miércoles 17 de julio el país puede colapsar si se hacen realidad los paros anunciados por el descontento de varios sectores agrícolas y mineros.
La hora cero se acerca y el Gobierno no ha podido conjurar la avalancha de paros anunciados por los sectores minero, carbonífero y agrícola para mañana miércoles 17 de julio, todos excusados en los problemas sociales y económicos que atraviesan actualmente, y al considerar que las carteras encargadas no están dando soluciones reales.
Además del fracaso de las negociaciones para levantar las protestas de los campesinos en el Catatumbo, se suma el desacuerdo del Ministro de Minas y Energía, Federico Renjifo con los representantes mineros de los departamentos de Chocó, Antioquia y Córdoba.
Los mineros insisten en derogar el decreto 2235 que faculta al Estado para destruir maquinaria y llevar a la cárcel a los que ejerzan de manera informal, así lo indicó el representante de la Asociación de Mineros de Colombia, Rubén Gómez, “no tenemos ninguna garantía constitucional que nos permita ejercer de manera digna nuestra labor. Exigimos hacer parte del código de minas, de la legislación minera para que se abran las opciones de trabajar”.
A dicha petición el Ministro Renjifo indicó que “el gobierno ha manifestado su voluntad, para que lo entiendan como un aliado de los mineros informales y si existen mecanismos que permitan aclarar esa posición en términos de normas, estamos dispuestos a hacerlo, como lo hemos hecho en varios decretos. El gobierno tiene un mecanismo para destruir maquinaria que esté relacionada con la criminalidad. Ese es un tema clarísimo y ahí no podemos hacer discriminación frente a la criminalidad. Nosotros vamos es a que esos operativos cubran a esa gente y no a los mineros que nada tienen que ver”.
Entre tanto el Director de la Cámara Colombiana de Minería, César Díaz, aseguró que si hoy no se llega a un acuerdo, se irán a paro trayendo graves consecuencias para el país.
“La formalización también incluye tener compromiso ambiental, responsabilidad social y obviamente unos estándares de seguridad industrial para sus trabajadores. El Gobierno ha sido claro en apoyo a la formalización, pero también un combate a lo que se ha denominado una minería criminal”.
A su vez, Iván Pardo, Presidente de Mineros de Boyacá, anunció que Acerías Paz del Río también se sumaría a la protesta.
“En protesta por la normatividad que está llevando a la desaparición de la minería artesanal y tradicional la cual se ha ejercido hace más de cinco siglos”.
Hoy reanudarán las conversaciones con ese sector en Medellín y en las que se espera que el Ejecutivo reconozca la labor de más de 300 mil mineros artesanales que exigen ser parte de la formalización.
De otra parte, el sindicato de trabajadores de la Drummond se mantiene en asamblea permanente con el fin de definir si también se suman a la huelga, para exigir que la multinacional atienda la solicitud de formalización del salario básico mensual para los más de cinco mil operarios, que actualmente reciben el pago por horas trabajadas.
Así mismo, los paneleros se encuentran divididos en cuanto a parar sus actividades en el mes de agosto ya que un amplio sector se niega a ir a paro, pese a que sus inconformidades tienen que ver con problemas y altos costos en la producción, además de los bajos precios y la poca inversión.
A este paso el Presidente Juan Manuel Santos deberá tomar medidas extremas pese a que lleva varias semanas entregando balances sobre las inversiones y la entrega de subsidios que ha hecho su gobierno a los sectores agrícolas del país. Sin embargo, su Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, lleva el mismo número de días explicando que la chequera se agotó y que no hay más dinero para atender las pretensiones asistencialistas de algunos gremios.
