En agosto se alcanzó el precio internacional más alto del cacao en los últimos tres años en el mercado de futuros de la Bolsa de Nueva York al alcanzar 3.260 dólares por tonelada.
A un mes de que finaliza el año cacaotero 2013/2014, el próximo 30 de septiembre, las expectativas son de un superávit de 40.000 toneladas, según los pronósticos de la Organización Internacional del Cacao (ICCO).
Sin embargo, esto no impidió que se alcanzara en agosto el mayor nivel de precios de los últimos tres años por una combinación de compras comerciales y de especulación a pesar de señales de suministro disponible.
Las compras se produjeron pese a un incremento de la llegada de cacao a los puertos en Costa de Marfil, el principal país productor, lo que constituyó un índice de suministro disponible.
Se prevé que la demanda seguirá creciendo en lo que resta del año por lo que hubo alguna presión en las compras, aunque los precios volvieron a bajar luego de conocerse la revisión que hizo la ICCO de los pronósticos para el año cacaotero 2013/2014 que antes era de un déficit y ahora habla de superávit.
Las mejores condiciones climáticas de África Occidental, respecto a lo esperado por el fenómeno de El Niño, hicieron que países como Costa de Marfil incrementaran su producción logrando un mejor abastecimiento.
No obstante, la demanda sigue siendo importante y va en aumento, tanto en los países europeos, como en los asiáticos y en Estados Unidos, por lo que las previsiones son de estabilidad en los precios internacionales para lo que resta del año civil.
Entre tanto en Colombia los precios también se mantienen en niveles por encima de $5.000 kilo, entre otras razones porque por estacionalidad de la cosecha, ésta es una época de baja producción.
De igual manera la estabilidad se ha logrado gracias a la intervención que ha hecho Fedecacao del mercado, comprando grano de excelente calidad con fines de exportación, ya que se tienen unos compromisos que comenzaron a cumplirse en agosto de vender a los mercados internacionales.
Se esperaba poder aprovechar más la coyuntura de precios internacionales altos pero por la baja producción actual esto no ha sido posible.
Así mismo, aunque el clima ha tenido alguna incidencia, por el Fenómeno de El Niño, sobre los cultivos de cacao por el exceso de calor, la producción por esta razón no bajará en los volúmenes que algunos alarmaron diciendo que en solo Santander serían alrededor de 8.000 toneladas menos, lo cual está descartado para el presente año.
De hecho, las lluvias han comenzado a llegar a las plantaciones de cacao en las principales zonas productoras, dando tranquilidad a los cacaocultores y se espera que al final del año civil 2014 se presente un ligero incremento respecto a la producción de 2013, aunque por debajo de las estimaciones iniciales, cuando todavía no se hablaba de El Niño.
En todo caso, las perspectivas siguen siendo favorables y se espera que la producción llegue a fin de año alrededor de las 50.000 toneladas y que los precios se mantengan por encima de $5.000 kilo.
De igual manera, se adelantan diálogos con el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Aurelio Iragorri, sobre los proyectos que se tienen con ese despacho para la renovación de 80.000 hectáreas de cultivos envejecidos y el incremento de nuevas siembras.
Es así como para las próximas semanas se espera hacer el lanzamiento de ocho nuevos materiales, fruto de la investigación de Fedecacao, que son más productivos y tolerantes a las enfermedades. Allí se espera la asistencia del ministro y su equipo de trabajo relacionado con el cacao.
En todo caso, durante el XXIX Congreso Nacional Cacaotero que se realizará el 19 y 20 de noviembre se hablará del tema de la producción, de los proyectos de nuevas siembras y de rehabilitación, así como de las perspectivas de comercialización y demás aspectos de interés para los cacaocultores del país.
Se trata del máximo evento del sector en donde participarán representantes de los productores de todo el país, elegidos democráticamente para llevar su vocería.
Allí se presentará el horizonte de la cacaocultura en Colombia y el mundo, que de acuerdo con las proyecciones es bastante despejado y con creciente interés de inversionistas nacionales y extranjeros.