Juan Manuel Santos escogió a Luis Carlos Villegas, Oscar Naranjo, Jorge Enrique Mora Rangel, Sergio Jaramillo y Frank Pearl para negociar los puntos de la agenda concertada con las Farc. Perfil de los encargados de poner fin al conflicto armado.
“La segunda fase de las negociaciones será la más importante” dijo este miércoles en la mañana el presidente Santos en rueda de prensa. Por eso escogió a los mejores jugadores para afrontar un periodo decisivo para el fin del conflicto armado el país.
Aprovechando la “oportunidad histórica” que tiene su gobierno y el Estado colombiano, Santos se la jugó por cinco hombres que tienen experiencia en el manejo de la fuerza, la seguridad, la industria y la negociación. En sus manos estará el desarrollo de un diálogo que no estará exento de problemas.
Dos exmilitares, un representante de los gremios y de la industria y dos funcionarios del gobierno y expertos en temas de seguridad y negociación son los escogidos por el primer mandatario para discutir, a partir del 4 de octubre, los cinco puntos de la agenda concertada.
Luis Carlos Villegas
El director de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia – ANDI desde 1996 es el representante de los gremios económicos en la negociación del gobierno con las Farc.
Villegas ha sido viceministro y Ministro encargado de Relaciones Exteriores, así como gobernador de Risaralda y senador de la República. El presidente afirmó que Colombia “lo conoce muy bien” y que serpa importante para el proceso de diálogo.
Con este empresario estarán representados los intereses de los industriales del país, que tendrán que entrar a negociar temas como política agraria, los programas de desarrollo y los enfoques de economía solidaria y cooperativa que impone la agenda firmada por las partes.
Será un proceso interesante, y no menos conflictivo que otros, ver a uno de los hombres más poderosos del país dialogar con los miembros de la guerrilla sobre puntos como los programas de desarrollo con enfoque territorial, la infraestructura y la adecuación de tierras.
General Oscar Naranjo
El “mejor policía del mundo” también hará parte del equipo negociador del gobierno. El presidente Santos tiene gran confianza y respeto en este representante de las Fuerzas Armadas, ya que en su gobierno lo nombró General de 4 estrellas, siendo el primer y único policía de Colombia en ostentar este rango.
Naranjo también ha tenido acercamientos al tema de la negociación, pues ya ofició como Comisionado de Paz encargado en 2009 cuando la guerrilla de las Farc liberó a seis secuestrados con el apoyo del gobierno brasilero.
Seguramente, el énfasis de Naranjo en las conversaciones tendrá que ver con el fin del conflicto.
No es descabellado pensar que el General hará aportes importantes en temas como el “combate para acabar la organizaciones criminales y sus redes de apoyo, incluyendo la lucha contra la corrupción y la impunidad, en particular contra cualquier organización responsable de homicidios y masacres o que atente contra defensores de derechos humanos, movimientos sociales o movimientos políticos”, uno de los puntos de la agenda.
El cese de hostilidades y la dejación de armas por parte de las Farc también serán puntos en los que Naranjo tendrá mucho que decir.
General Jorge Mora Rangel
El ex comandante del Ejército es sin duda la representación de los militares en la mesa de diálogo con las Farc. A su cargo estuvo la seguridad del proceso de paz del gobierno Pastrana, que se realizó en el Caguán.
Mora Rangel también fue partícipe de la reestructuración de la milicia, que incluyó el incremento en el pie de fuerza y la compra de gran parte del armamento con el que el Estado combate a la los grupos ilegales en la actualidad. En la comandancia de las Fuerzas Militares, trazó y ejecutó el Plan Patriota en su primera fase, convirtiéndose en pieza clave de la entonces naciente seguridad democrática.
El presidente lo escogió “por los kilates que le preceden” y porque sabe que las Fuerzas Militares se sentirán bien representadas por el General. Mora Rangel preside actualmente la Asociación Colombiana de Oficiales en Retiro.
Sin embargo, personajes relacionados con el conflicto armado como el expresidente Andrés Pastrana se mostró preocupado por el nombramiento del militar. Según Pastrana, Mora Rangel nunca creyó en el proceso de paz que realizó su gobierno, siempre generaba problemas y podría convertirse en “una piedra en el zapato” del nuevo intento de reconciliación.
Frank Pearl
El exministro de Ambiente fue uno de los dos funcionarios del gobierno nacional que inició los acercamientos con las Farc. Pearl lleva seis meses conversando con la guerrilla y, junto a Sergio Jaramillo, es el negociador que más conocimiento tiene del estado de las cosas en la negociación.
La vinculación del economista bogotano al gobierno Santos tuvo, en su momento, la doble intención de fortalecer el Sistema Nacional Ambiental y brindar su apoyo en los acercamientos con el grupo insurgente, que en ese momento eran secretos.
Frank Pearl fue nombrado en el año 2006 Alto Consejero Presidencial para la Reintegración y posteriormente Alto Comisionado para la Paz cargo que desempeñó hasta el 2010. Sus aportes en temas de retorno de los guerrilleros a la vida civil y en el fin del conflicto armado serán fundamentales para el desarrollo de la negociación.
Sergio Jaramillo
El hasta hace poco Alto Consejero para la Seguridad Nacional también integrará la mesa de negociación entre el gobierno y las Farc. Lo hará desde una figura que ha tenido más fracasos que éxitos: será el Comisionado de Paz.
Jaramillo fue asesor en Derechos Humanos durante el primer periodo de Álvaro Uribe, y redactó el documento de la política de seguridad democrática. Estuvo en el Gobierno hasta el 2004 y luego pasó a dirigir la Fundación Ideas para la Paz, en la que se le hizo seguimiento a los temas de conflicto armado y seguridad.
Además, fue viceministro para los derechos humanos y asuntos internacionales en la cartera de Defensa, cuando era dirigida por Juan Manuel Santos. En el 2010.
Al interior del gobierno aseguran que Jaramillo es la mano derecha del Presidente, que le habla al oído y tiene incidencia en las decisiones que toma el primer mandatario en temas de seguridad. Por esta razón, el Presidente le confió a este funcionario pertenecer a los acercamientos con la guerrilla desde el primer momento.
Según expertos, Jaramillo es un experto en la lógica de la guerra y este saber hacer le permite encontrar las herramientas y los mecanismos adecuados para encaminar al país hacia la paz.