Rihanna cambia el micrófono por el hilo, la aguja y la pasarela. La cantante de Barbados pone un pie en el mundo de la moda con una primera colección en la pasarela de Londres, pero no es la única intrusa de este mundillo: Victoria Beckham, Lindsay Lohan, Jennifer López o Penélope Cruz también se han pasado, en algún momento de su trayectoria, al diseño.
La pasión por la moda de las “celebrities” no tiene límites, hasta el punto de que muchas son capaces de compaginar sus profesiones como cantante, modelo o actriz para convertirse en diseñadoras de mucho o poco prestigio.
Con desigual resultado, este intrusismo en el mundo de la moda tiene un variado número de ejemplos: Victoria Beckham, Lindsay Lohan, Jennifer López, Penélope Cruz, Madonna o Gwen Stefani han decidido coger hilo y aguja, y ponerse manos a la obra.
La última en apuntarse a esta moda ha sido Rihanna. La cantante de Barbados cambia el micrófono por el hilo, la aguja y la pasarela, con su primera colección para la marca River Island, que podrá verse en febrero en la pasarela de la Semana de la Moda de Londres.
No es la primera cantante en subirse a una pasarela y codearse con los grandes de la moda: el rapero Kanye West ha presentado dos colecciones en París con desigual y dudoso resultado, mientras que todo el mundo recuerda el fichaje de Lindsay Lohan por la firma Ungaro, una apuesta que hizo saltar las costuras a más de un entendido.
Experiencias pasajeras aparte, muchas cantantes, modelos y actrices han hecho de su pasión por el diseño un auténtico proyecto empresarial.
Madonna, una de las pioneras
La polifacética Madonna fue una de las pioneras en el sector. En 2007 se asoció con la cadena europea H&M para presentar una selección de diseños, pero no fue hasta 2010 cuando lanzó la firma juvenil Material Girl, en colaboración con su hija Lourdes. Por si fuera poco, el año pasado anunció nueva línea, Truth or Dare by Madonna, con la que comercializará calzado, bolsos, ropa interior y complementos.
Luego vino Victoria Beckham, otro magnífico ejemplo de “celebrity” reconvertida a diseñadora. Creó en 2009 su marca y ha pisado en dos ocasiones la pasarela neoyorquina para presentar las propuestas de la firma que lleva su nombre y que han aplaudido crítica y público. El año pasado, obtuvo su primer reconocimiento con el premio a la mejor marca del año en los premios de la moda británica, imponiéndose a las reconocidas Burberry y Tom Ford.
Al igual que el resto de sus compañeras, ella es su mejor publicidad; no en vano, decidió acudir con uno de sus diseños a la boda del príncipe Guillermo y Kate Middleton.
Colecciones Cápsula, la alianza perfecta
A veces, las incursiones de las famosas en el mundo de la moda se saldan con las llamadas “colecciones cápsula”, colaboraciones de una sola colección -con una selección de piezas- en las que tanto la marca como el personaje en cuestión salen beneficiados.
Anna Dello Ruso para H&M, Scarlett Johansson para Reebook, Kate Moss para Topshop, Miley Cyrus y Max Azria para Walmart, las hermanas Cruz para la firma Mango, la actriz Milla Jovovich para la italiana Marella, Gisele Bundchen para C&A o Jessika Parker para Halston Heritage… Las colaboraciones se repiten hasta el infinito.
Para Penélope Cruz, diseñar una colección entera de ropa era “un sueño” que consiguió cumplir gracias a esta colaboración. Las piezas que las hermanas Cruz realizaron para la firma española durante tres temporadas combinaban las prendas de líneas masculinas e inspiración “vintage” para el día, y las siluetas femeninas y glamourosas para la noche.
Este gran número de incursiones de famosas en el mundo de la moda ha abonado el terreno de tal modo que a nadie parece sorprender las últimas propuestas: Katie Holmes presenta 14 vestidos junto a la estilista Jeanne Yang en la Mercedes-Benz Fashion Week de Nueva York, y Heidi Klum inicia su nueva etapa como diseñadora con una colección de prendas y complementos para niños de cero a cinco años.
Diseñadoras consolidadas
A pesar de estas colaboraciones esporádicas, muchas llevan años obteniendo grandes beneficios con su línea de ropa y han hecho de ella una consolidada línea de negocio.
Jennifer López diseña ropa desde hace casi una década, y tiene una línea de gafas y un perfume, mientras que la cantante Jessica Simpson ha hecho un pequeño parón en su carrera tras ser madre, pero su línea de moda Jessica Simpson Collection sigue tan activa como al principio.
Otra de las cantantes que ha conseguido asentar sus anhelos en el mundo del diseño es Gwen Stefani, vocalista de No Doubt, con la marca L.A.M.B., acrónimo de Love Angel Music Baby y nombre de uno de sus trabajos musicales en solitario. Con varias incursiones en la Semana de la Moda de Nueva York, la firma es un proyecto personalista que representa el amor por el diseño y la moda de la cantante.
“Tiene mucho que ver con mi estilo y cómo mezclo las cosas. Es una marca para llevarla todos los días”, señala la cantante sobre una marca que combina la inspiración “vintage” con reminiscencias futuristas.
Las incursiones de las “celebrities” en el mundo de la moda son tan amplias y variadas como sus personalidades. El tiempo es el que decide si sus firmas han llegado para quedarse en la pasarela o para tener una breve vida.
Con EFE