América está a cuatro puntos de culminar su vuelta a primera. Vencieron en Cartagena gracias a una buena actuación de su estrella Lucumí. El mediapunta caleño asistió en el primero a Farías y liquidó el encuentro con un golazo desde fuera del área en la segunda mitad.
Empezó mal pero ha enderezado el camino de regreso. América está a cuatro puntos de culminar su vuelta al lugar donde por historia e hinchada pertenece. Los diablos rojos irónicamente se habían acostumbrado a vivir en el infierno, pero después de cinco años por fin se asoma la luz al final del túnel. Con su victoria frente a Cartagena, deja el camino muy allanado para culminar la ansiada vuelta.
Lo hizo gracias a un gran Lucumí que se echó el equipo a hombro. El mediapunta lideró a los caleños con la asistencia en el primero de la tarde y un golazo que liquidaba el partido en la segunda. A América le bastó con meter primera marcha para llevarse el partido. Cartagena en ningún momento generó peligro en el arco rival.
Abrió el marcador Farías con un gol de nueve de área. Aguantó el desmarque al límite del fuera de juego, con inteligencia, esperando el momento exacto para el pase de Lucumí. Jeison puso el balón donde era necesario y el argentino remató a placer. El tanto reconocía el mayor mérito de América por llevarse el encuentro.
La segunda mitad no cambió el guión. Cartagena seguía atacando con la timidez de un primerizo y América aprovechaba los espacios a la contra. En un balón largo, la pelota le cayó al más inspirado de la tarde. Un Lucumí que recibió el balón escorado en la banda izquierda. Controló con el muslo, con la fortuna que le quedó perfilado en perfecta posición para volver a enganchar a otro marcador y sacar un disparo potente y raso que se coló por la esquina del poste.
El segundo mató el partido. La conformidad de Cartagena con el resultado incomodó hasta los aficionados, que saltaron al campo a falta de cinco minutos enrabietados por la pasividad de los suyos. Poco después el átrbitro daba por finalizado el partido por la invasión de campo. Solo quedaban cinco minutos. La victoria deja a América con medio pie en primera. Primero del grupo y a cuatro puntos de romper una maldición que pocos se creen ya. Y con tres matchball por delante.
